Todavía Erick Hernández no ha escrito la última página de su larguísima lista de récords de dominio del balón. Con 56 años, el exfutbolista cubano sigue hechizando la pelota, justo como demostró este sábado en el capitalino hotel Copacabana, donde consiguió una nueva marca en la modalidad de sentado, solo con los pies y un peso de 1.5 kilogramos atado en cada tobillo.
Según reseña la agencia EFE, Hernández consiguió dominar la esférica por espacio de 3:04.02 horas, lo cual le valió para superar su anterior marca, fijada en 3:02.03 en septiembre del 2018. En aquella oportunidad, el antillano superó la primacía del también habanero Luis Carlos García.
Erick, por enésima ocasión, dio gala de su concentración, sobriedad, enfoque y ardua preparación para mantener el control de la pelota por un tiempo prolongado y en situaciones extremas, en este caso con peso en cada uno de sus tobillos. Sin embargo, esto no representó un problema para el estelar dominador, quien cumplió con su objetivo sin mayores sobresaltos.
De cualquier manera, el ejercicio demandó un notable esfuerzo físico de Hernández, quien aseguró a los periodistas presentes en el intento de récord que tuvo mucha exigencia sobre el cuádriceps, el abdomen, la espalda alta, los hombros y el trapecio.
Este es el segundo récord de Erick en el 2023, después del que consiguió en febrero pasado, también desde la posición de sentado y con un peso de 1.5 kilogramos en los tobillos, pero dominando el balón solo con la cabeza. En esa ocasión, controló la bola por 1:12.05 horas y rompió su propia marca de 1:10 horas.
Conocido como “el Dominador”, Hernández cuenta con varios récords Guinness homologados: en 2005, por tocar la pelota 319 veces en un minuto con la cabeza, y en 2009, cuando controló el balón con los muslos durante una hora y 28 minutos.
En abril del año pasado dio -de pie- 351 toques con la cabeza al balón durante un minuto y superó así la marca que estaba en poder del chino Gao Chong, con 341.
En 2020, desde su casa debido al aislamiento obligado por la pandemia, repitió su presencia en el Libro Guinness, cuando le dio con la cabeza a la redonda en 188 ocasiones en solo 30 segundos, para batir por uno la anterior marca, que él mismo había homologado en 2011.
Hernández comenzó a practicar la modalidad del dominio del balón en 1994, una tradición que había practicado primero su hermano Douglas, precursor de la especialidad en Cuba.
Desde entonces ha probado su habilidad para tocar el balón con casi todas las partes del cuerpo, logrando marcas de dominio con los muslos, las rodillas, los pies, la cabeza, sentado, de pie o corriendo los 100 metros y el maratón.