Thomas Mueller, Jerome Boateng y Mats Hummels no volverán a la selección de Alemania tras el fiasco de la defensa del título en la Copa Mundial el año pasado. Al descartar de sus planes futuros al experimentado trío del Bayern Múnich, el técnico nacional Joachim Low allanó el camino para la llegada de una nueva generación de jugadores.
“Ahora es el momento de marcar el rumbo para el futuro. Queremos darle una nueva fisonomía al equipo. Estoy convencido de que este es el paso correcto”, aseguró.
La decisión, que sorprendió a muchos, representa una apuesta calculada de Low, que cuenta con jugadores más jóvenes para llenar el vacío que dejarán los tres jugadores del Bayern.
Mueller anotó 38 goles en 100 partidos con Alemania y había sido un pilar desde que compartió la Bota de Oro como máximo anotador en el Mundial de 2010, torneo en el que también fue consagrado como el mejor jugador joven.
Hummels y Boateng, ambos centrales, se despiden de la selección con 70 y 74 partidos, respectivamente. Ambos formaron la columna vertebral de la defensa del equipo durante años.
Los tres fueron figuras clave para que Alemania se coronara campeón en el Mundial de Brasil 2014, pero ahora pagarán el precio por no haber podido impedir que el equipo quedara último de su grupo en la defensa del título en Rusia.
“Los jóvenes que pasen tendrán el espacio que necesitan para crecer. Ahora depende de ellos asumir la responsabilidad”, afirmó Low, quien quiere marcar un nuevo comienzo en la selección con miras a las eliminatorias de la Eurocopa 2020.
Low recibió respaldo del presidente de la Federación Alemana de fútbol, Reinhard Grindel, y del manager del equipo, Oliver Bierhoff.
Grindel dijo que los cambios llegan “en el momento adecuado” y Bierhoff abogó por “un nuevo comienzo para el equipo”.
El propio Grindel también ha resistido las consecuencias de la Copa Mundial, a pesar de haber sido duramente criticado por su manejo de la tormenta mediática que causaron los centrocampistas Mesut Ozil e Ilkay Gundogan al posar para las cámaras en Londres junto al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, antes de la cita mundialista.
Esto llevó a que ambos jugadores sufrieran maltratos por parte de los aficionados y a que Ozil renunciara a la selección tras el torneo, en medio de acusaciones de racismo. Ozil dijo que lo convirtieron en el chivo expiatorio de la debacle del Mundial y fue particularmente crítico con Grindel por echarle más leña al fuego.
La reorganización del seleccionado también propició la salida de Sami Khedira, Sebastian Rudy y Kevin Trapp, mientras que el delantero Mario Gómez se retiró.
Las bajas forzadas de Mueller, Hummels y Boateng significan que sólo quedan cuatro jugadores del equipo ganador de la Copa del Mundo en 2014: Toni Kroos, Manuel Neuer, Matthias Ginter y Julian Draxler. Está por ver si Mario Goetze o Shkodran Mustafi regresarán.
Se espera que jugadores como Niklas Suele, Jonathan Tah, Thilo Kehrer, Antonio Rudiger o Ginter cubram el vacío en la defensa, mientras que Draxler, Timo Werner, Serge Gnabry, Leroy Sané, Julian Brandt y Kai Havertz asumirán las responsabilidades de la ofensiva.
Podría haber más sorpresas el viernes, cuando Low anuncie su equipo para el próximo amistoso contra Serbia, el 20 de marzo en Wolfsburgo, y el primer partido de la eliminatoria europea contra Holanda, en Ámsterdam, cuatro días después.