Pocas frases usa más el cubano para expresar la superación continua de dificultades que aquella de “estar en la luchita”. La expresión cae como “medalla al cuello” para calificar la suerte del movimiento deportivo nacional en este 2023. Pese a los muchos obstáculos que le sobreviven, el deporte todavía suma glorias al orgullo patrio.
Al margen de las discretas actuaciones de las delegaciones cubanas en los dos eventos multidisciplinarios convocados en este calendario, los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador y los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile, varios acontecimientos deportivos alcanzaron relevancia global. Repasemos una selección de los diez mejores.
En la lucha…
Nuestros representantes de la lucha olímpica brillaron en disímiles plazas a nivel internacional, al punto de que la disciplina fue seleccionada como deporte del año en Cuba por el Instituto Nacional de Deportes Educación Física y Recreación (Inder). Con dos títulos (Luis Orta y Gabriel Rosillo) y un bronce (Oscar Pino) en el Campeonato Mundial de Belgrado, Serbia, y una cosecha sin precedentes en ambos estilos entre femenino y masculino en los juegos Centrocaribeños y Panamericanos, era esperada la distinción.
La brillante temporada del habanero de los 67 kilogramos, Luis Orta, pasa a la historia como una de las mejores, pues se colgó la presea dorada en los tres principales eventos. Como pequeñas manchas quedan sus dos únicas derrotas ante el chino Husiyuetu Husiyuetu en paradas del Ranking Series, lo cual no evitó su elección por la Unión Mundial de Lucha como Mejor gladiador del estilo grecorromano.
Del Team Asere a estrellas y anillos
A inicios de año, la Federación Cubana de Béisbol sorprendió a los seguidores del pasatiempo nacional con la noticia de que convocaría a peloteros que actuaban en Major League Baseball para el equipo que participaría en el quinto Clásico Mundial. Aunque el proceso mantuvo criterios de exclusión, los aficionados celebraron la inclusión de estrellas como Luis Robert Jr. o Yoan Moncada.
Con la presión de cambiar la historia y devolver a Cuba a puestos cimeros en el mejor certamen por países de esta disciplina, el llamado Team Asere comenzó con dos derrotas antes Países Bajos e Italia que lo pusieron al borde de la eliminación. Sin embargo, los dirigidos por Armando Johnson sacaron fuerzas para superar a Panamá y Taipei de China. Increíblemente se combinaron otros desenlaces para concretar la clasificación a la siguiente ronda. En cuartos de final, los cubanos superaron 4-3 a Australia para alegría de millones de compatriotas que veían a su equipo en semifinales por primera vez desde la primera edición del certamen en 2006, cuando quedaron subcampeones.
El panorama resultó más espectacular porque la ciudad de Miami, principal enclave de emigrados cubanos, acogería el duelo de acceso a las medallas ante la favorita novena norteamericana. Con una carga política y cultural que competía con lo deportivo, Cuba cayó 14-2 frente a los anfitriones y campeones defensores. No obstante, a su regreso a La Habana, los integrantes del Team Asere fueron recibidos como héroes nacionales por una fanticada que disfrutó de esa suerte de regreso a la gloria.
Después de las emociones de la final del Clásico Mundial, que tuvo Japón como vencedor, los reflectores del béisbol se quedaron en Estados Unidos para enfocar la temporada de las Grandes Ligas. Un total de 27 peloteros cubanos vieron acción en el llamado Big Show y ocho de ellos acudieron al Juego de la Estrellas, lo que constituyó un nuevo récord. Se firmaron otras marcas de interés para la nación, como el campeonato de bateo del villaclareño Yandy Díaz en la Liga Americana o los 38 jonrones de Luis Robert Jr.
Pero lo más significativo fue el anillo dorado que terminaron enfundándose dos de los nuestros: la hazaña de José Adolis García y Aroldis Chapman con los Texas Rangers ya constituye una leyenda de Las Mayores. El jardinero avileño completó su mejor etapa regular con selección al All Stars y Guante de Oro, y en la postemporada mereció el premio al Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Su seguridad defensiva y el oportuno poder de su bate fueron dos de las armas letales de los tejanos. Lo del Misil Holguinero resultó también meritorio, pues cuando muchos lo creían acabado resurgió como acomodador de los Kansas City Royals, mereciendo otro llamado a la constelación de estrellas. Esto despertó el interés de los Rangers, que lo adquirió para asegurar los cierres de juego y no decepcionó. Con los dos caribeños en el terreno, la franquicia de Texas logró su primer campeonato de Grandes Ligas.
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El Ídolo de Güines y su lucha por ser candidato
Al ajedrez nacional también se le han desprendido hijos que hoy brillan internacionalmente bajo otras banderas. Es el caso del mejor trebejista cubano de este siglo, el Gran Maestro Leinier Domínguez. Al llamado Ídolo de Güines le dio por dar golpes de autoridad sobre los tableros de la élite mundial en 2023, al punto de merecer el papel de candidato a retador de la corona que porta el chino Ding Liren; mas una regla de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) lo impidió.
Antes de diciembre, Leinier había participado en tres grandes torneos: la Copa Mundial de Bakú, Azerbaiján, y dos prestigiosas copas en San Luis, Estados Unidos. En agosto, el ahora federado por los Estados Unidos avanzó por segunda vez en su carrera hasta los cuartos de final de una lid del orbe (lo consiguió en 2004), instancia en la que cayó en un peleado match ante el también representante estadounidense Fabiano Caruana. En un Mundial mucho más fuerte que aquel de hace 19 años ganó tres partidas, empató cuatro y solo cayó ante Caruana, performance que le permitió sumar 5.6 unidades a su puntuación ELO y escalar hasta el puesto 14 del ranking en vivo.
Con ese impulso, Domínguez se dispuso a luchar por el cetro del campeonato nacional de los Estados Unidos por quinta ocasión desde que juega para ese país. En septiembre, cuando luchó contra 12 monstruos del ajedrez en el club de San Luis, acumuló 6.5 puntos producto de dos éxitos y nueve tablas. Así ocupó nuevamente el segundo escaño del podio, empatado con Wesley So y el prodigio Abhimanyu Mishra, todos por detrás de Caruana.
Otro subtítulo alcanzaría en noviembre en la misma ciudad compitiendo en la famosa Copa Sinquefield. Ahí nuevamente lo superó Fabiano, quien dominó el evento por tercera vez. El invicto de dos triunfos y seis igualdades no le alcanzó para coronarse, pero sí supuso un aumento de 11.2 puntos para llegar a 2765 de ELO y ascender hasta el séptimo escaño del listado universal, lo cual habría bastado para acceder al Torneo de Candidatos 2024. Sin embargo, la FIDE echó mano a una cláusula que lo obligó a competir fuera de los Estados Unidos para reafirmar su derecho.
Leinier hizo las maletas para intentar desesperadamente su inclusión mediante el Festival Internacional Chessable Sunway Sitges, en Barcelona, donde debía completar, como mínimo, 7.5 puntos de 10 posibles. Hace unos días, y tras cinco rondas en que había acumulado 5 unidades, decidió abandonar el festival, porque ya había perdido 4.7 tantos en su promedio y esto lo distanciaba demasiado de Wesley So, su antecesor en el ranking.
El cubanoamericano no pudo con la imposición de la Federación Internacional y perdió la oportunidad de participar en el match de retadores, algo que entre los nacidos en la isla solo logró el Gran Maestro Jesús Nogueiras en 1985. No obstante, a sus 40 años Leinier se ubicó entre los 10 mejores jugadores del planeta para orgullo de los cubanos, que siguieron atentos sus actuaciones en este inolvidable 2023.
Tenis de mesa a tres raquetas
Si una disciplina puede ser catalogada como sorpresa del año, es el tenis de mesa. Actuaciones históricas en los torneos de San Salvador 2023 y Santiago de Chile 2023 y el boleto olímpico lo certifican. El trío de raquetas de Daniela Fonseca, Jorge Moisés Campos y Andy Pereira plantaron bandera ante los puestos delanteros de los rankings continentales.
Veinticinco años después, Cuba volvió dominar la lid de los Juegos Centroamericanos y del Caribe con tres metales de oro, dos de plata e igual cantidad de bronce. En los Panamericanos lograron las coronas en doble mixto de Campos y Fonseca que les sacaron pasaje a París 2024, y doble masculino, así como el subtítulo individual de Pereira, quien solo cayó frente al brasileño Hugo Calderano, cuarta raqueta mundial.
Reina de agua dulce en los Centrocaribeños
Criada y entrenada en las aguas del río Miel en Baracoa, la ciudad primada de Cuba, Elisbeth Gámez se convirtió en nuestra reina de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023. Sus cuatro coronas y un subtítulo constituyen una de las mejores demostraciones para una nadadora cubana en lides multideportivas.
La guantanamera se convirtió en la primera nacida en este archipiélago en ganar las pruebas de 100 y 200 metros en el estilo libre en unos Juegos, a lo que sumó oros como líder de las postas de 4×100 y 4×200 metros libres. A nuestra lancha oriental le quedó combustible para entrar segunda en la final de 400 metros en Complejo Acuático Ciudad Merliot de Santa Tecla. Este año, además, la llamada “Sirena del Miel” impuso récords nacionales en los 100 y en 50 metros libres en alberca corta. Nada mal para una chica que conoció tarde la superficie de las piscinas.
Nombres propios en el voleibol
Pese a ser un deporte colectivo, para los cubanos lo mejor del voleibol en este calendario vino desde lo individual. La selección nacional masculina conquistó la medalla de oro de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023, mientras las mujeres quedaban en bronce. Sin embargo, unos meses después, en la lid multidisciplinaria continental de Santiago de Chile 2023, ninguno de los dos equipos pudo escalar al podio de premiaciones.
Tras un certamen preolímpico de altibajos, el elenco masculino mantiene esperanzas de conseguir una de las cinco plazas disponibles para los Juegos Olímpicos de París 2024, posibilidad que pasa por ascender un puesto en el ranking mundial con una buena actuación en la siguiente Liga de Naciones. También tiene posibilidades de ir a la cita estival de la capital francesa la mejor dupla de hombres del voleibol de playa.
Pero algunos nombres propios elevaron el prestigio de la Mayor de las Antillas a nivel internacional. Resulta que, según el renombrado sitio de análisis Volleybox, a los mejores jugadores de cada sexo en 2023 les corre sangre cubana por las venas.
Melissa Vargas: otro talento que triunfa lejos de las canchas cubanas
Melissa Vargas, nacionalizada por Turquía, acumuló el mayor puntaje (1100.5) de las métricas evaluativas entre las mujeres, seguida por Gabriela Guimarães (921.5) de Brasil, las dominicanas Brayelin Martínez (634.8) y Brenda Castillo (628.3), y la también brasileña Kisy Nascimento (612.5).
La nacida en la sureña provincia de Cienfuegos comandó a las turcas hacia lo más alto del podio en la Liga de Naciones y el Campeonato Europeo, donde acaparó casi todos los premios individuales, incluyendo los de Jugadora Más Valiosa (MVP, por sus siglas en inglés).
A nivel de clubes resultó insuperable, pues conquistó los títulos nacionales de China, con el Tianjin Bohai Bank, y de Turquía, con el Fenerbahce Opet. En estas lides también acumuló cuanto reconocimiento individual estuvo al alcance de su posición de opuesta. Como si fuera poco, se llevó a casa la copa de la Champions League con el club otomano.
Entre los hombres, el que más alto voló fue el también cienfueguero Miguel Ángel López, con acumulado de 955 unidades, destronando así a su compatriota nacionalizado polaco Wilfredo León, quien bajó al cuarto puesto, con 698. López se erigió este año como la estrella de la reconocida Superliga Brasileña al ganarla con el Sada Cruzeiro y merecer el premio al Jugador Más Valioso (MVP). Con ese club también conquistó la medalla de oro del Campeonato Sudamericano (MVP mediante) de la Copa y la Super Copa brasileña y se colgó la de bronce en el Mundial de Clubes. Con Cuba logró la corona en los Centrocaribe y sumó metales bronceados en el torneo Norceca y el Preolímpico. En casi todos estos eventos mereció lauros por su servicio y ataque.
A espera de glorias colectivas, se disfrutó de lo más sublime de lo individual.
A los puños
Como ya es costumbre, varios boxeadores cubanos como Robeisy Ramírez, David Morrell Jr., Frank Sánchez, Arlen López, Lázaro Álvarez o Julio César La Cruz acapararon títulos en las diversas organizaciones que rigen esta disciplina a nivel internacional. Entre tantos puños en alto, nos quedamos con dos acontecimientos: el cinturón de Morrell Jr. en las 168 libras por la Asociación Mundial de Boxeo y la cuarta corona Panamericana de La Cruz.
El villaclareño Morrell Jr. no pudo concretar un duelo que unifique su reinado, pero sí expuso su corona en dos ocasiones y en ambas salió airoso. En abril le brindó la oportunidad al brasileño Yamaguchi Falcao, a quien fulminó en el primer asalto, y en diciembre también noqueó al ghanés Sena Agbeko. Después de esta gran campaña, a los estelares campeones mexicanos Canelo Álvarez y David Benavidez no les quedará más remedio que aceptar el reto del invicto Morrell Jr. (10 victorias, 9 por KO).
Por su parte, el veterano La Cruz inscribió en la eternidad su condición de único púgil en ganar cuatro Juegos Panamericanos. Aunque no cerró una temporada invicta, sí pudo lograr los cetros en los dos eventos multideportivos y ganar Faja Internacional de Oro de la división supercrucero que entrega la Asociación Mundial de Boxeo.
Arrancada y salto
En este archipiélago caribeño han nacido varias estrellas del atletismo internacional, por lo que no sería sorpresa que incluyéramos alguna de sus gestas en este compendio. El mejor atleta del año en el llamado deporte rey fue el triplista Lázaro Martínez, medallista de plata del Campeonato Mundial de Atletismo y campeón de los Juegos Centroamericanos y del Caribe y de los Juegos Panamericanos. Sin embargo, para este reportero el mejor momento lo protagonizó una joven corredora.
El pasado 27 de mayo la velocista Yunisleydis de la Caridad García impuso un nuevo récord nacional en la carrera de 100 metros planos con tiempo de 11.08 segundos durante el mitin de atletismo de Martinica. La anterior plusmarca era de 11.10 segundos, lograda por Liliana Allen en julio de 1992.
Esta temporada la velocista villaclareña de 24 años debutó en campeonatos del orbe con un discreto lugar 28 en los 200 metros, pero termina este año con 15 medallas de oro, dos de plata y una de bronce en eventos internacionales. En San Salvador completó un podio: oro como parte del relevo corto, plata en los 200 metros planos y bronce en el hectómetro. Mejoraría en los Juegos Panamericanos, con cetros en los 100 metros planos y el 4×100 metros planos, y la plata en los 200 metros planos.
Al Everest por primera vez
Aunque no es una modalidad olímpica ni tiene arraigo en nuestra cultura, el alpinismo es considerado el deporte de montaña más antiguo y completo que existe. Pocos son los nacidos en Cuba que se han dedicado a escalar y muchos menos han soñado con subir hasta la cima del monte Everest, la montaña escalable más difícil del planeta.
Por eso el ascenso del habanero Yandy Núñez hasta la cumbre de 8848.43 metros de altura el miércoles 17 de mayo constituye la mayor proeza en la historia del alpinismo nacional. Este joven radicado en Islandia ya acumula conquistas de varios de los puntos más altos del mundo, como el Aconcagua o el Mont Blanc, y siempre dedica sus éxitos a su familia y a Cuba.
Yandy Núñez es ya el primer cubano que logra llegar al Everest
Remando hasta el final
En la colección dicharachos cubanos, “estar remando” es uno de los más familiares para nosotros. Y fue eso lo que hizo mejor que nadie la canoísta Yarisleidis Cirilo, merecedora del nombramiento como la mejor atleta cubana de 2023 por Inder y la mejor del continente por la Asociación de la Prensa Deportiva de Ámerica (AIPS) y por la encuesta de Prensa Latina (PL).
La guantanamera pasó a la historia como la primera campeona del orbe de canotaje nacida en Cuba en conquistar la medalla de oro en el Campeonato Mundial de piragüismo de Duisburgo, Alemania, en la prueba de C-1 a 200 metros. En esa lid también entró sexta en la canoa biplaza a 500 metros, asegurando pasaje olímpico en ambas pruebas. En los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile, Yarisleidis también subió a lo más alto del podio en el C-1 a 200 metros.
Así entró en un exclusivo listado de deportistas en los que el Inder ha depositado todas sus esperanzas para París 2024. Para ellos no escatimarán atenciones y recursos dentro de las limitaciones económicas que golpean la gestión del ente deportivo.
Seguramente de quienes integran esa selección hablaremos dentro de 12 meses, cuando compilemos lo mejor de 2024. A la lista se sumarán otros cubanos que, aunque no compitan con nuestras selecciones, nos enorgullecerán en los Juegos Olímpicos y otros certámenes de jerarquía mundial.