En el verano de 1984, Norberto Oberburger transformó su historia deportiva en leyenda. A finales de julio, viajó desde Merano, en el norte de Italia, hasta Los Ángeles, en la soleada costa oeste de Estados Unidos, aunque no fue precisamente a broncearse en las playas de Malibu o Santa Mónica. Al contrario, por la cabeza de Oberburger daban vueltas a dos preocupaciones: su esposa estaba a punto de dar a luz en Europa mientras a él le tocaba batirse con algunos de los mejores pesistas del planeta en los Juegos Olímpicos, cuyo torneo de halterofilia también sería considerado Campeonato Mundial por una rara excepción.
Entre sesiones de entrenamiento pasaba los días, esperando por la noticia del nacimiento de su hijo, que llegó justo el 4 de agosto, 72 horas antes de chocar contra los pesados discos metálicos en el Albert Gersten Pavilion, sede de las competencias de pesas en la cita estival. Aquel suceso fue una inyección de energía, al punto de que Oberburger, en la categoría de 110 kilogramos, levantó 175 en el ejercicio de arranque y 215 en el envión, para totalizar unos inalcanzables 390 kilos de total. La cacería del resto de los competidores fue inútil: su más cercano perseguidor, el rumano Ștefan Tașnadi, quedó con 380.
Sin embargo, el triunfo de Oberburger en Los Ángeles se minimizó. La ausencia de algunos exponentes de Europa del Este por el boicot de la Unión Soviética y otros 15 países a los Juegos Olímpicos de 1984 le restó méritos a una victoria histórica para Italia: ningún pesista de esa nación había ganado un título estival desde 1924 y tampoco ninguno lograría repetir la hazaña hasta nuestros días.
Introducing you to the M81KG sessio🤩 Italia, Indonesia and Uzbekistan made it to the podium
🥇Oscar Reyes Martínez🇮🇹
Snatch: 163KG
C&J: 193KG
Total: 352KG🥈Erwin Rahmat Abdullah🇮🇩
Snatch: 145KG
C&J: 209KG
Total: 354KG🥉 M. Toshtemirov🇺🇿
Snatch: 164KG
C&J: 188KG
Total: 352KG pic.twitter.com/IzLwbf2cqa— IWF (@iwfnet) September 11, 2023
Oberburger se convirtió también en el primer monarca global de la halterofilia italiana, pues el torneo de pesas de las Olimpiadas de Los Ángeles fue considerado un Campeonato Mundial. Durante casi 40 años, Norberto presumió de ese honor en solitario, y quizás nunca imaginó que el próximo campeón universal de las pesas en su país sería un cubano.
Oscar Reyes Martínez (1996) ni siquiera había nacido cuando Oderburger se codeaba en la élite con los mejores pesistas de su época, mayormente en los años 80 del siglo pasado. Natural de Holguín, el antillano comenzó la práctica del deporte a principios del presente siglo y ascendió por el sistema deportivo de la isla caribeña hasta integrar la selección nacional, con la cual participó en el Torneo “Manuel Suárez In Memoriam” y el Panamericano de la disciplina en Miami, hace ya seis años.
Pero en el 2018 emigró a Italia, donde se estableció y comenzó un nuevo camino. De inicio no estuvo vinculado a los discos y la palanqueta, pero unos amigos le consiguieron un trabajo en un gimnasio en Ancona y ahí despertó otra vez el “bichito” del deporte. Lo que vino después nadie lo podía vaticinar: Reyes, fruto de su trabajo, ha logrado un ascenso meteórico en un período de cinco años, aunque oficialmente no pudo competir por la nación europea en lides internacionales hasta después de marzo del 2021, cuando obtuvo la ciudadanía italiana.
No obstante, del 2018 al 2020 ganó las competencias nacionales en Italia y labró el camino para concursar en el Mundial de Bogotá, celebrado en diciembre del pasado año. En la capital colombiana obtuvo la quinta posición general, resultado que puso su nombre sobre la mesa como uno de los candidatos a considerar en la élite de la división de 81 kilogramos.
El 2023 ha sido una temporada de confirmación. Tan pronto como en abril, Reyes ganó tres de las cinco coronas italianas en el Campeonato Europeo que se celebró en el Karen Demirchyan Complex de Yerevan, Armenia. El holguinero dominó los ejercicios de arranque y envión y derrotó en el cómputo total al joven turco Batu Han Yüksel. Pero lo mejor estaba por llegar en Riad, Arabia Saudita, donde ha asaltado la cima del orbe.
En el Prince Faisal bin Fahd Olympic Complex de la capital saudí, Oscar fue el rey de la división de 81 kilogramos, sobre todo gracias a su rendimiento en el arranque, en el que logró un jalón efectivo con 163 kilos en la palanqueta. Esa fue la segunda mejor marca en el snatch, solo superada por los 164 levantados por el uzbeco Mukhammadkodir Toshtemirov, campeón mundial juvenil hace dos años.
Parecía que el joven euroasiático sería su principal oponente en la lucha por el mayor acumulado final, pero quedó con 188 kilos en el envión y tanto el cubano como el indonesio Rahmat Erwin Abdullah le pasaron por el lado, este último con un récord del orbe (209 kg) en el clean and jerk. Reyes, por su parte, tuvo problemas en ese segundo ejercicio, pues falló sus dos primeros intentos sobre 192 y 193 kilogramos, respectivamente. Eso lo dejó en una posición de máxima tensión, un todo o nada del que salió airoso con un soberano esfuerzo.
En declaraciones que recoge Eurosport, Oscar dijo estar muy emocionado y alegre por el título del orbe. “Aunque no me sentí muy bien en la última prueba de impulso, di todo lo que tenía para ganar el título. El levantamiento de pesas es un estilo de vida como siempre digo y hoy demostramos de qué estamos hechos los levantadores de pesas”, apuntó el holguinero, quien completó el doblete Europeo-Mundial en solo cinco meses.
Su actuación se ganó los elogios de Antonio Urso, presidente de la Federación Italiana de Halterofilia: “Hay una enorme satisfacción porque es la primera medalla de oro que ganamos en la era moderna. Lo dije en tiempos insospechados que esta selección nacional y esta Federación tenían un potencial enorme que expresar. Incluso hoy, después de ganar un título mundial, estoy convencido de que todavía tenemos mucho que decir en el futuro próximo. La satisfacción y la alegría son dobles: por un resultado loco y por un margen de crecimiento que nos dará muchas satisfacciones”.
De cierta manera, Oscar Reyes salvó la actuación de los pesistas cubanos emigrados que participan en el Campeonato Mundial de Riad. Había mucha expectación con la presentación de Addriel La O con el Equipo de Refugiados y con el regreso de Arley Méndez (titular del orbe en el 2017) a la alta competencia defendiendo los colores de Chile. Sin embargo, ninguno de los dos salieron al ruedo en sus respectivas categorías y dejaron una incógnita sobre su real estado de forma de cara a próximos eventos internacionales.