El 58 Torneo Internacional de Ajedrez Capablanca in Memoriam cerró este lunes en Varadero con el triunfo del danés Jonas Buhl-Bjerre en el grupo Élite y del cubano Dylan Berdayes en el apartado Abierto.
En un final de foto-finish Buhl-Bjerre, quien ya se había coronado en la edición de 2023, volvió a conquistar el título del segmento principal del Capablanca a pesar de los pronósticos que colocaban como favorito al joven ruso Volodar Murzin.
Ambos jugadores cerraron las diez rondas convocada con idéntico acumulado de 5,5 puntos, pero la fórmula de desempate no acompañó a Murzin, vigente campeón mundial de partidas rápidas, según reseña el portal deportivo Jit.
Mientras el ruso veía las acciones de la última fecha desde la distancia —por calendario le tocaba el descanso— Bulh-Bjerre conseguía la media unidad que necesitaba para darle alcance en la cima del ordenamiento, gracias a un empate frente al macedonio Evgeny Romanov.
Entonces fue necesario echar mano a los cálculos de desempate para definir al campeón. En ellos terminó haciendo la diferencia la victoria del danés sobre Murzin en la séptima ronda del certamen.
Las otras dos victorias del nuevamente campeón del Capablanca las consiguió frente a Romanov en la quinta fecha, y sobre el cubano Carlos Daniel Albornoz, quien protagonizó un discreto desempeño y terminó en el quinto y último escaño.
Albornoz, único anfitrión en el grupo principal, recibió cuatro estocadas y no consiguió vencer a ninguno de sus cuatro rivales en las dos rondas del torneo.
Así, el camagüeyano se despidió con apenas dos puntos, redondeados con la división de honores en la despedida frente al ruso Arseniy Nesterov, quien completó el podio al cosechar cuatro unidades.
La cuarta posición en el Élite la ocupó Romanov después de alcanzar 2,5 rayas en todo el recorrido.
Con los resultados de la nueva versión del Capablanca in Memóriam, se extendió a 14 la cadenas de torneos sin un campeón cubano en su apartado principal.
El último ajedrecista nacido en la isla que consiguió ascender al trono de la justa más emblemática de Latinoamérica fue Leinier Domínguez, monarca en el ya lejano año 2009.
Dylan, profeta en su tierra
El habanero Dylan Berdayes sacó la cara por la armada de Cuba y se coronó en el grupo Abierto del certamen en lo que es uno de los resultados más notables de su trayectoria deportiva.
Al pactar la paz en el cierre con el azerí Azer Mirzoev, el cubano llegó a 7,5 puntos de nueve posibles, una cifra a la postre inalcanzable para el colombiano Santiago Ávila, su perseguidor en la lucha por la corona.
En la ronda de cierre Ávila selló un empate con el cubano Omar Almeida y quedó con siete unidades, las mismas que archivó el villaclareño Elier Miranda, quien tuvo un impresionante repunte en las ultimas tres rondas del torneo.
Su sólida actuación en el final del Capablanca le permitió a Miranda completar el podio y aventajar por media raya a siete jugadores, entre ellos su coterráneo Almeida.
Para acceder al trono Berdayes consiguió seis victorias y firmó tres igualdades. Como muestra de su excelente paso quedó su perfomance ranking de 2644 puntos Elo, así como las 19.1 unidades que añadirá a su actual coeficiente de 2469 con la próxima actualización del escalafón universal.