Desde 2008 la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones, Apex-Brasil, tiene un Centro de Negocios en La Habana. En ese tiempo el comercio bilateral ha aumentado un 9,2 % y, al cierre de 2013, alcanzó 624 millones de dólares. Tales cifras ubican al gigante sudamericano como segundo socio de Cuba en el continente y entre los cinco primeros a nivel mundial.
São Paulo y la capital cubana quedaron unidos en julio pasado mediante una ruta aérea directa, lo cual implica mayor fluidez y celeridad en el intercambio. Sin duda, la Zona Especial de Desarrollo Mariel es el principal proyecto conjunto, donde Brasil resulta el mayor inversionista, con 900 millones de dólares. En opinión de Hipólito Rocha, director general de Apex-Brasil, en la Isla existen aún grandes potencialidades de crecimiento para los vínculos de negocio entre los dos países.
A finales de marzo viajó a La Habana una delegación brasileña con representantes de 32 empresas. ¿Cuáles fueron los resultados más importantes de ese encuentro? ¿Llegaron a algún acuerdo?
Vi muy positiva la intención brasileña, hay una expectativa muy grande. Esta misión fue a un nivel de prospección de negocios, tanto en la instalación productiva en Mariel como sondeo de mercado; para que los empresarios recibieran información, conocieran el régimen creado allí, qué soportes y garantías de inversión dará. Estamos comenzando a estudiar las posibilidades de tener almacenes y traer producciones para acá.
Ahora tenemos una fase de inteligencia comercial, de resumen y análisis de esa misión. Treintaidós empresas es un número bastante grande. Luego, eso tendrá su tiempo, bajo decisión de cada directivo de ambas partes. Depende mucho de los ejecutivos y empresarios cubanos, de la forma de atraer y mostrar que vale la pena hacer negocios con Cuba. Tiene que haber mucha promoción, mucho profesionalismo en cómo se presentan los proyectos prioritarios para el país. Algunas empresas ya expusieron ideas concretas, sus intereses de seguimiento. Quisiera hablar de eso con más propiedad, con nombres, con números; pero estamos en un momento de evaluación. Mi apreciación es que ha sido una excelente experiencia inicial.
¿Qué atractivos ofrece Cuba para los empresarios e inversionistas brasileños?
La Zona de Mariel es un proyecto innovador, con un puerto de alta tecnología. Creo que va a atraer muchos negocios, no solo de Brasil, sino también de otras partes del mundo. Cuba tiene un personal técnico muy preparado. Esa es una gran ventaja. Realmente Cuba está en disposición de crecer en determinados sectores y mejorar otros, se encuentra en un punto de acierto. No puede ir a la velocidad del mundo porque es un país pequeño, con ciertas limitaciones por el Embargo, pero están adoptando medidas correctas, profesionales.
Cuba tiene un desarrollo enorme en la biotecnología, está mostrando vacunas y productos eficaces, con tecnología de punta. Brasil ya está trabajando en esto, no en una escala tan grande, pero está facturando prácticamente 100 millones de dólares anuales. Entre Cuba y Brasil existe una enorme facilidad de entendimiento, hay simpatía, una identidad natural. Eso no pasa con todo el mundo, y esa circunstancia puede generar intercambios beneficiosos. Tenemos buenos procedimientos de negocio, un trato estable, cumplimos los acuerdos entre las partes, el resultado debe ser el crecimiento.
Recientemente visitaron el país la presidenta Dilma Rousseff y el ex presidente Lula Da Silva. ¿Brasil está otorgando especial atención a los negocios con Cuba? ¿Cuánto pueden ayudar las buenas relaciones entre los dos gobiernos en el ámbito comercial y económico?
En todo aspecto, la buena relación política influye directamente en el desarrollo comercial, es muy importante porque crea caminos de credibilidad. Con esas visitas tenemos una prueba real de que Cuba es prioridad para nuestro país. Apex ha sido muy activa, está en los eventos principales, somos grandes participantes de la Feria Internacional de La Habana (FIHAV).
Brasil ha tenido una posición abierta, clara. Creo que Cuba debe adoptar ese tipo de relación con otros países también, para que realmente haya un crecimiento y un desarrollo sustentable. La relación comercial Brasil-Cuba es un ejemplo para que otros trabajen también con flexibilidad, con coherencia, por buscar un camino.
El 2014 promete ser un gran año para los negocios en Cuba, pues ya funciona la Terminal de Contenedores de Mariel, y está aprobada la nueva Ley de Inversión Extranjera. ¿Cuáles serían los planes inmediatos de Apex-Brasil en este entorno? ¿Qué nuevos sectores podrían desarrollarse?
Trabajamos en casi todos los sectores: industria, construcción, energía, comercio exterior. Podemos avanzar en las tecnologías, transporte, turismo, el área agroalimentaria. Estamos en un proyecto llamado Más Alimentos, que no es traer alimentos de Brasil, sino crear un soporte técnico, mecánico, para poder producir más aquí. Podemos ayudar mucho en el desarrollo de la agricultura cubana, ya lo estamos haciendo para mejorar la cosecha de soya y las siembras de maíz.
Tenemos experiencia con los primeros centrales administrados por una empresa brasileña. Somos los mayores productores de azúcar del planeta, y por eso hay mucho que aportar para recuperar la siembra de caña y la productividad del azúcar cubano.
Tenemos 11 mil médicos cubanos que están dando un servicio excelente allá. Todo eso debe equilibrar bastante la balanza comercial entre los dos países.
Este año debemos aumentar el número de empresas en FIHAV. Queremos traer más misiones brasileñas, ver qué tipo de negocios (que beneficie a ambas partes) pueden hacer en la Zona de Mariel. Pienso que ese es nuestro punto focal. Hoy las cosas con Cuba siguen muy bien, con posibilidades reales de aumentar. Ahora, dependemos de las gestiones, que las dos partes decidan sus negocios…
Excelentes relaciones entre cuba y brasil son garantía para que nuestro pueblo de un paso adelante en su desarrollo económico. Burlando de esta forma el duro bloqueo Estadounidense. Las relaciones políticas son excelentes mediadores para que se logren acelerar los proyectos, pero eso también es un arma de doble filo tenemos que concentrarnos mas en demostrar que somos un país eficientes y ofrecemos ofertas de desarrollo económicos MUY favorable para ambos países o de lo contrario cuando exista un cambio de política en brasil que ocurre con periodicidad en dependencia de quien sea el que gane los comicios electorales. Todo el esfuerzo serán en vano. Apostemos por un desarrollo sustentable, eficiente y competitivo que en este mundo nada se obtiene gratis !!