A escasos cuatro meses en el cargo presidencial, la derecha y la ultraderecha peruanas solicitaron la destitución de Pedro Castillo por una aludida “incapacidad moral”, pero la movida fue rechazada por el Congreso al quedar a seis votos por debajo de los 52 necesarios para poder tramitarla.
Según Patricia Chirinos, diputada de Avanza País, que presentó la moción de destitución: “Las acciones de quien se jacta de ser el presidente del pueblo. Pero que, en realidad, se ha convertido en el verdugo de los peruanos, sobre todo de los más pobres”.
Tanto partidarios como opositores del presidente se manifestaron frente al Congreso en Lima. Algunos defendían al mandatario; otros decían que era “una persona peligrosa para la democracia”.
De acuerdo con expertos, la derecha peruana no se va conformar con este fracaso. La politóloga peruana Paula Távara dijo: “Creo que aquí no se acaba. Esto no es una carrera de velocidad sino una maratón. Habrá intentos e intentos. Este este pedido de vacancia lo que buscaba realmente era forzar al presidente a comparecer ante el Congreso”.
“Creo que sabían que no se iba a llegar a la vacancia, pero sí a exponer a Castillo a los insultos, pues la destitución no sería un tema de argumentos”, añadió.
Según Távara, en los próximos intentos serán claves los partidos de centro o centroderecha como Acción Popular y Alianza Para el Progreso (APP), que esta vez dieron su apoyo a Castillo, pero que no está asegurado que voten igual en próximas ocasiones.
“No hay un augurio de tranquilidad para el país en el largo plazo, ni en el mediano”, concluyó la politóloga.
La moción de destitución presidencial era la quinta presentada en el Parlamento durante los últimos cuatro años, lo que impidió culminar sus mandatos a los ex presidentes Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) y Martín Vizcarra (2018-2020).