En un giro inesperado en las tensas relaciones entre Irán y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), este martes se firmó en El Cairo un acuerdo para reanudar la cooperación bilateral y el acceso a inspecciones nucleares.
El hecho se concreta menos de dos meses después de que una ley parlamentaria iraní suspendiera toda colaboración con la agencia de la ONU a la que tildaba de agente de Israel.
El canciller iraní, Abbas Araghchi, y el director general del OIEA, Rafael Grossi, acordaron “modalidades prácticas” para retomar las inspecciones en las instalaciones nucleares iraníes, marcando un paso crucial para la transparencia y la confianza en un momento de creciente tensión internacional.
El proceso se dio en el marco de una reunión trilateral con Egipto, cuyo ministro de Relaciones Exteriores, Badr Abdelatty, jugó un papel facilitador.
Maniobras tácticas iraníes
Este avance se produce tras la suspensión unilateral de la cooperación por parte de Irán en julio de 2025, una respuesta parlamentaria al ataque estadounidense contra instalaciones nucleares iraníes y una mutuamente destructiva guerra que duró 12 días entre Israel e Irán.
Desde entonces, la vigilancia del OIEA sobre la actividad nuclear iraní había quedado severamente limitada. De hecho, a principios de julio, una ley aprobada por el parlamento iraní y firmada por el presidente Masoud Pezeshkian suspendió todas las actividades de control e inspección, dejando esas decisiones en manos del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán.
Esa medida representó un cambio radical en la política iraní frente al OIEA, luego de años de supervisión y cumplimiento parcial del acuerdo nuclear de 2015.
La norma parlamentaria fue motivada por las denuncias de ataques israelíes y estadounidenses a sitios nucleares clave, y por informes del OIEA que el gobierno iraní calificó de “sesgados” e instrumentalizados políticamente.
Durante meses, solo se permitió al OIEA inspeccionar una planta operada con asistencia rusa, mientras que el resto del programa nuclear quedó fuera del escrutinio, aunque con las reiteradas negativas de Teherán de que aprovechaba la desconexión para dotarse de un arma nuclear.
Ahora, dialogantes y analistas ven en el reciente acuerdo una señal de disposición iraní para negociar y colaborar con el OIEA, al menos en aspectos técnicos, evitando un aislamiento total y el agravamiento del conflicto diplomático.
Desafíos técnicos y políticos para la supervisión
La reanudación de las inspecciones nucleares enfrenta ahora desafíos técnicos, ya que Irán mantiene algunos controles y restricciones.
El acuerdo firmado establece que las visitas y actividades de vigilancia se harán en un marco que respeta las “nuevas circunstancias” impuestas por la legislación iraní y sus prerrogativas soberanas.
El director del OIEA, Rafael Grossi, calificó la firma como “un paso importante en la dirección correcta” y agradeció la mediación egipcia. Sin embargo, subrayó la complejidad técnica para lograr un monitoreo completo y efectivo, mientras que Irán enfatizó que su cooperación es limitada y condicionada al respeto por su independencia.
Irán advirtió que el pacto puede cancelarse si Occidente reimpone sanciones o intenta presionar políticamente a Teherán, lo que dejaría la supervisión nuclear en un estado crítico.
Según la agencia española EFE, desde los bombardeos de Israel y EE.UU. se desconoce el paradero de las reservas de uranio altamente enriquecido en Irán, con una pureza del 60 %, muy cerca del necesario para fabricar bombas atómicas.
Teherán inaugura laboratorio nuclear
En paralelo, este mismo martes, el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI) afirmó que el país persa se ha convertido en una potencia regional cuya capacidad nuclear “es indestructible”, refirió el portal Hispantv.
“Este ciclo es un esfuerzo completamente autóctono y basado en investigaciones, y (…), se considera algo sostenible que no será destruido por ningún bombardeo. Nuestro país, con una cultura milenaria y jóvenes entusiastas y sabios, merece el mejor lugar”, dijo Mohamad Eslami, durante la ceremonia de inauguración y explotación del Laboratorio de Gestión del Desgaste.
Irán suspende cooperación con el OIEA tras ataques a sus instalaciones nucleares
Se trata de una instalación dedicada a la investigación y desarrollo en el ámbito de la tecnología nuclear, enfocado en la gestión y control del desgaste en componentes utilizados en dicha industria.
De acuerdo con Eslami, “la industria nuclear es el motor de las ciencias y tecnologías avanzadas, y es una necesidad urgente en todos los campos. Nadie puede quitarle esta industria al pueblo iraní”.