El Senado aprobó hoy jueves un proyecto de ley de financiamiento emergente de 8.3 mil millones de dólares para combatir la propagación del coronavirus. La votación fue de 96 a 1.
Se destinan así miles de millones de dólares para investigación y el desarrollo, desde vacunas y terapias hasta el almacenamiento de suministros médicos. Y miles de millones para reembolsar a estados y localidades, muchos aplastados por el costo de combatir el virus.
“Hoy enfrentamos una grave crisis con la propagación del coronavirus. El pueblo estadounidense espera que dejemos a un lado la política”, dijo el presidente del Comité de Asignaciones del Senado, Richard Shelby, republicano. “En situaciones como esta, no se deben ahorrar gastos”.
La rápida acción bipartidista se produce inmediatamente después de la rápida aprobación de la Cámara el miércoles. Solo dos republicanos votaron en contra.
El proyecto de ley es más de tres veces el que solicitó el presidente Donald Trump, pero los legisladores mantuvieron a la Casa Blanca informada durante una semana de intensas negociaciones. Republicanos cercanos al tema aseguran que Trump lo firmará.
La legislación destina 7.8 mil millones de dólares a las agencias federales colocadas en la primera línea de lucha contra el virus: los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los Institutos Nacionales de Salud, el Departamento de Estado y la Administración de Pequeñas Empresas. Asigna tres mil millones para la investigación y el desarrollo de vacunas y terapias, y mil millones se envían dentro de los treinta días a los esfuerzos de preparación estatales y locales. Con la medida se que dictamina que ningún estado reciba menos de cuatro millones.
Se destinarán otros mil millones para ayudar al Departamento de Salud y Servicios Humanos a fortalecer los esfuerzos de preparación para la salud. Cien millones se destinarán a los centros de salud comunitarios.