Un reportaje de la NBC señala que en las próximas semanas la administración de Trump emitirá una propuesta que dificultará a los inmigrantes legales convertirse en ciudadanos u obtener la residencia si han utilizado programas de bienestar público.
La medida, que no necesita la aprobación del Congreso, es parte del plan del asesor de la Casa Blanca, Stephen Miller, para limitar el número de inmigrantes que obtienen estatus legal en Estados Unidos cada año. La información de NBC se basa en un borrador descrito por una fuente confiable a esa cadena televisiva.
Abogados y defensores de los inmigrantes sostienen que este sería el mayor cambio en el sistema legal de inmigración en décadas. Con esa normativa –aseguran– podrían verse afectadas más de 20 millones de personas. Sería especialmente difícil para los inmigrantes que trabajan en empleos de bajos salarios. Según trascendidos, una versión del plan ya se ha enviado a la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, último paso antes de publicarla en el Federal Registrer.
Una portavoz del Departamento de Seguridad Nacional declaró: “La administración se compromete a hacer cumplir la ley de inmigración existente, que tiene la intención de proteger al contribuyente estadounidense al garantizar que los ciudadanos extranjeros que buscan ingresar o permanecer en Estados Unidos sean autosuficientes”.
Miller, uno de los autores intelectuales del llamado Muslim ban, ha buscado disminuir la cantidad de inmigrantes que obtienen estatus legal en Estados Unidos. Expertos señalan que aun antes de que la nueva normativa entre en vigencia, la administración Trump ha venido haciendo más difícil para los inmigrantes obtener las tarjetas de residencia y la ciudadanía.
De acuerdo con estadísticas de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) durante el año fiscal 2016 1,2 millones de inmigrantes se convirtieron en residentes legales permanentes o en titulares de tarjetas verdes. 753 060 se naturalizaron como ciudadanos estadounidenses.
Los datos del primer trimestre de este año fiscal 2018 indican que la administración ha disminuido el otorgamiento de tarjetas de residencia en un 20 por ciento. De seguir esa tendencia, la ciudadanía naturalizada se reducirá un 10 por ciento a fines de octubre en comparación con el año fiscal 2016. Varios abogados dijeron a la NBC que habían notado un aumento en el número de clientes rechazados en sus solicitudes de tarjetas de residencia y ciudadanía.
En un comunicado Michael Bar, portavoz de USCIS, dijo que ese organismo “evalúa todas las solicitudes de manera justa, eficiente y efectiva caso por caso. La USCIS no ha cambiado la forma en que se han adjudicado las solicitudes de naturalización. La ley generalmente requiere que un solicitante elegible debe haber sido admitido adecuadamente para recibir la residencia permanente o para convertirse en ciudadano estadounidense”.
Abogados de inmigración se preparan para rechazar la nueva movida de la administración Trump. “Cualquier política que obligue a millones de familias a elegir entre la negación del estatus y la alimentación o la atención médica exacerbaría problemas como el hambre, las necesidades de salud no cubiertas, la pobreza infantil y la falta de vivienda, con consecuencias para su propio bienestar”, dijo en un comunicado el Centro Nacional de Leyes de Inmigración.