La semana pasada trascendió que el presidente Trump se estaba preparando para instruir al ex abogado de la Casa Blanca, Donald McGahn, para desafiar una citación del Congreso. Finalmente se ha confirmado. McGahn no comparecerá.
“El Congreso no puede obligar constitucionalmente a los asesores principales del presidente a declarar sobre sus obligaciones oficiales”, escribió el secretario de Justicia adjunto, Steven Engel, en un memorando legal de 15 páginas al principal demócrata de la Cámara de Representantes que el mes pasado emitió la citación judicial a McGahn.
Joyce Vance, ex abogada de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Alabama, calificó la movida como “algo que hacen los jefes de la mafia, no los presidentes”. El profesor de la Escuela de Derecho de Harvard, Laurence Tribe, dijo que la posición de la Casa Blanca resulta inconcebible cuando la Cámara de Representantes está ejerciendo su poder para investigar si el presidente ha cometido o no infracciones de la ley.
McGahn es el testigo más citado en el informe Mueller sobre la intromisión electoral rusa, la posible conspiración entre el Kremlin y la campaña de Trump y las alegaciones de obstrucción del propio Trump. El Comité Judicial de la Cámara lo citó para comparecer, responder preguntas y entregar documentos.
El presidente del Comité Judicial, el representante Jerrold Nadler, de Nueva York, dijo la semana pasada que se estaba preparando para declarar a McGahn en desacato al Congreso en caso de que decidiera no presentarse. Aunque es una marca negra en el registro de un testigo, una citación por desacato podría dar como resultado que la Cámara de Representantes recurra a un tribunal federal para tratar de hacer cumplir su citación.
En enero de 2018, el New York Times informó que el presidente le había pedido a McGahn que instruyera a los principales funcionarios del Departamento de Justicia destituir al fiscal especial Robert Mueller, pero se negó. También publicó que había estado cooperando con la investigación de Mueller durante varios meses.
El 29 de agosto de 2018, el presidente Trump anunció que McGahn abandonaría su cargo en el otoño, poco después de la confirmación del juez Brett Kavanaugh ante la Corte Suprema de Estados Unidos.
McGhan abandonó la administración Trump el 17 de octubre de ese año.