Redacción OnCuba
Nicole tocó tierra como huracán categoría uno esta madrugada al sur de Vero Beach, pero ya degradada a tormenta tropical se desplazaba sobre el centro de Florida con vientos de 60 millas por hora (100 km/h), informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
La que fuera el octavo huracán de este año en la cuenca atlántica tocó tierra sobre las 3.00 horas (07.00 GMT) del jueves después de haber atravesado la isla Gran Abaco, Bahamas. Florida reporta inundaciones, árboles caídos, daños en tejados e infraestructuras y cortes de electricidad. Varias escuelas se encuentran cerradas.
Tropical Storm #Nicole Advisory 13A: Nicole Now Centered Over Central Florida. Strong Winds, Dangerous Storm Surge and Waves, and Heavy Rains Continue Over a Large Area. https://t.co/tW4KeFW0gB
— National Hurricane Center (@NHC_Atlantic) November 10, 2022
A las 07.00 horas, Nicole estaba a unos 50 kilómetros al suroeste de Orlando y a unas 90 kilómetros al este de Tampa, en la costa oeste de Florida. Se movía a 14 millas por hora (22 km/h) en dirección oeste-noroeste, pero girará pronto al noroeste y norte-noroeste y el viernes acelerará hacia el norte y norte-noreste.
Según pronóstico del NHC, el centro de Nicole cruzará el centro de Florida y posiblemente emergerá sobre el extremo noreste del Golfo de México, para luego cruzar la región del Panhandle (nororeste de Florida) y Georgia entre esta noche y el viernes.
Los vientos máximos sostenidos han disminuido a cerca de 60 mph (100 km/h) con ráfagas con rachas más altas y Nicole se irá debilitando en su avance sobre tierra. Es probable que se convierta en una depresión tropical sobre Georgia esta noche o el viernes temprano y que se fusione con un frente sobre el Atlántico el viernes por la noche. Sin embargo, sigue siendo una gran tormenta tropical.
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También pueden producirse tornados en distintas áreas del sureste de EEUU.
A fines de septiembre el huracán Ian, de categoría 4, tocó tierra en el suroeste de Florida, cruzó el estado rumbo al Atlántico y dejó una estela de muerte y destrucción de la que las zonas afectadas van a tardar largo tiempo en recuperarse.
Con información de Efe y local10.
