Rui Ferreira
Desde 2017 una sentencia de muerte en Florida debe estar apoyada en la decisión unánime de 12 miembros de un jurado. Uno solo que se oponga y la sentencia implica automáticamente cadena perpetua.
Esto trae como consecuencia que muchos casos particularmente chocantes para la opinión pública terminen siendo blanco de criticas contra el juez, cuando necesariamente no es su responsabilidad.
El último fue el de Nikolas Cruz, autor de una masacre que estremeció a la sociedad en febrero de 2018 y que victimizó a 14 estudiantes y tres maestros en una escuela de Florida. El joven de 17 años fue sentenciado en noviembre pasado a cadena perpetua porque 3 de 12 jurados se opusieron a la pena máxima.
Sentenciado a cadena perpetua autor de la mayor masacre escolar en Florida
Esto ha llevado al gobernador de Florida, Ron DeSantis, a insistir en acabar con esta práctica. “Bien, que tenga una gran mayoría”, dijo DeSantis a la Asociación de Sheriffs de Florida. “Pero no puedes simplemente decir que una persona vota no. Tal vez 8 de 12 o algo así”, agregó.
“Estás en una situación en la que tienes 12 jurados y solo un jurado lo veta, luego terminas sin obtener la sentencia”, subrayó.
Refiriéndose a la masacre perpetrada por el joven Cruz, DeSantis se equivocó: “Y creo que tuviste una decisión de 11 a 1, donde los 11 dijeron que debería recibir la pena capital. Uno dijo que no. Y no sabemos qué pasó. Pero sí creo que hay personas que forman parte de estos jurados que nunca tienen la intención de administrar la pena capital”.
Tres miembros del jurado no votaron por la pena de muerte.
La jueza Elizabeth Scherer impuso la sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por cada uno de los 17 cargos de asesinato de los que se había declarado culpable, con sentencias consecutivas.
Además, impuso una sentencia de cadena perpetua con un mínimo de 20 años para cumplir en 14 de los 17 cargos de intento de asesinato, y cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional para los tres cargos restantes de intento de asesinato. Todos los cargos deben ejecutarse consecutivamente, dictaminó la jueza.
Los reclusos condenados a muerte en Florida pueden elegir la electrocución o la inyección letal. Según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte, 30 presos han sido exonerados mientras estaban en el corredor de la muerte, más que en cualquier otro estado del país.
