Rui Ferreira
El gobernador de Florida, Ron DeSantis anunció un plan para enviar más de 1 100 soldados de la Guardia Nacional y agentes del orden público al estado de Texas.
Según el gobernador, el cuerpo militar se desglosa en 800 soldados, 200 oficiales de policía del Estado, FDLE, 101 policías de otros departamentos estatales y 20 del departamento de pesca y vida silvestre.
Se les unen cinco aviones, 17 drones, dos vehículos para operaciones de mando y 10 botes, según menciona un comunicado de prensa.
El gobernador DeSantis afirmó: “Bajo mi dirección, las agencias estatales, incluidas las fuerzas del orden y la Guardia Nacional de Florida, se están desplegando en Texas con activos que incluyen personal, botes y aviones”.
No es la primera vez que DeSantis envía refuerzos a la frontera sur de Estados Unidos.
Reportan autoridades fronterizas disminución de encuentros con inmigrantes indocumentados
En 2021, respondió a las solicitudes de asistencia de los gobernadores de Texas y Arizona, y desplegó a más de 100 agentes de la ley durante seis semanas.
En ese entonces, describió la situación en la frontera sur como “una catástrofe bajo la Administración Biden”.
La oficina de DeSantis aseguró que el personal enviado a la frontera estará allí durante 30 días, con la posibilidad de extensiones en caso de ser necesario.
El gobernador, quien probablemente anuncie a fines de este mes su candidatura para la carrera presidencial de 2024, ha convertido la inmigración en un tema central desde que accedió al cargo.
La semana pasada promulgó una ley que refuerza su programa de reubicación de inmigrantes y limita los servicios sociales para quienes carecen de un estatus legal permanente, y pretende abordar los desafíos y preocupaciones asociados con la inmigración ilegal y fortalecer la seguridad fronteriza, según su oficina de Comunicaciones.
El envío de refuerzos a Texas es un paso más en lo que DeSantis ha presentado como su “compromiso” por proteger la integridad de las fronteras y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Las autoridades fronterizas dijeron en estos últimos días que ha habido una disminución sensible en los encuentros con inmigrantes indocumentados.
