Las fuertes lluvias que cayeron sobre el sur de Florida la semana pasada, en particular en la zona de Ft. Lauderdale, al norte de Miami, han provocado la falta de todo tipo de combustibles. Este miércoles la crisis ya va por cinco días.
Las autoridades sostienen que el problema tiene dos razones básicas, claramente visible por las inmensas colas en las dos ciudades, como constató OnCuba durante un recorrido por el zonas afectadas el lunes y el martes: primero, el hecho de que muchos choferes están comprando más gasolina de la que necesitan. Y, segundo, el poco trasiego de camiones pipas entre el puerto de Ft. Lauderdale y Miami.
El puerto es el centro de distribución del sur de Florida, el lugar donde los buques tanque atracan para descargar el combustible. Según las autoridades locales, de los doce puntos de descarga solo nueve están trabajando, muchos a media máquina porque todavía hay zonas inundadas.
Esto ha llevado a las autoridades municipales a apelar a la población para que se modere en las compras. “La gasolina existe, no ha llegado a muchas gasolineras, pero llegará. Hago un llamado al público a que se modere, la gente debe pensar en los demás, que también tienen sus necesidades. Debemos compartir lo más equitativamente posible y que alcance para todos”, dijo la alcaldesa del condado Miami-Dade, Daniella Levine Cava.
En un comunicado, las autoridades del puerto de Ft. Lauderdale dijeron que “no hay escasez de gasolina, diesel, combustible para aviones u otros productos derivados del petróleo. (Pero) se espera que los retrasos en la entrega continúen disminuyendo”. Sin embargo, no indicaron una fecha para la normalización, aunque los buques siguen llegando.
“Hace tres días que estoy aquí en la gasolinera esperando. No me dicen nada y no me queda de otra porque la poca gasolina que tengo en el tanque no la puedo gastar buscando gasolineras”, dijo el lunes a OnCuba Jorge Parellada, quien explicó que se ha quedado durmiendo en su auto en una gasolinera de la barriada de Kendall, en el SW del condado. Según dijo, varios choferes se cuidan los autos entre ellos cuando la gente es recogida por sus familiares para poder ir a sus casas a asearse y comer. “Hay una solidaridad. Pero también tenemos otro problema: estamos faltando al trabajo”.
Las autoridades no han informado a cuanto asciende el déficit de combustible en el sur de Florida. Pero America Radio reveló el miércoles por la tarde que, según fuentes de la industria, como mínimo hay que entregar 550 000 galones antes del viernes para que las dos ciudades no queden paralizadas.
Los medios de transporte estatales y de auxilio médico se abastecen de las reservas condales, estas no parecen afectadas.
“Se supone que tenga que garantizar lo necesario a ambulancias y carros de bomberos. Pero ni eso puedo”, confesó a OnCuba el gerente de una gasolinera de ciudad Doral, una de las municipalidades del condado Miami-Dade.