Un sistema de tormentas causó más de 30 tornados en el centro de Estados Unidos, dañó viviendas en Oklahoma, destruyó gradas en una pista de carreras en Missouri y trajo más lluvias e inundaciones a varios estados.
El mal tiempo comenzó el lunes en la noche en las planicies del sur y avanzó hacia el noreste. Missouri y partes de Illinois y Arkansas estaban el martes en la trayectoria. El miércoles, la tormenta se desplazará hacia la región de los Grandes Lagos, donde perderá fuerza. Sin embargo, otro sistema de tormentas adquiría fuerza y podría desatarla el resto de la semana en una franja que va desde Texas hasta Chicago, según el Servicio Nacional de Meteorología.
Patrick Marsh, coordinador de alertas meteorológicas del Centro de Predicción de Tormentas de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés), dijo que testigos reportaron 26 tornados el lunes y seis más el martes. Uno, cerca de Tulsa, tuvo una anchura de 1,61 kilómetros (una milla) y vientos de entre 179 y 217 km/h (entre 111 y 135 mph).
“Por supuesto que se trata de una situación de cuidado”, declaró Marsh.
Un tornado ocurrido el martes cerca del aeropuerto internacional de Tulsa dejó una persona herida y dañó una docena de viviendas. El aeropuerto quedó indemne, los pasajeros fueron trasladados a albergues durante unos 30 minutos y varios vuelos fueron demorados.
La portavoz de Manejo de Emergencias de la zona de Tulsa, Kim CacLeod, dijo que cuadrillas rescataron a un hombre atrapado bajo un árbol. En Arkansas, trabajadores intentaban el martes en la tarde liberar a una mujer atrapada por un árbol que cayó debido a los fuertes vientos.