El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves una orden ejecutiva para sancionar a la Corte Penal Internacional (CPI) por sus acciones contra Estados Unidos y aliados como Israel.
Trump considera que la CPI ha emprendido “acciones ilegítimas e infundadas contra Estados Unidos” e Israel, definido como un “aliado estrecho”. Considera que el organismo ha “abusado aún más de su poder al emitir órdenes de arresto infundadas” contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su exministro de Defensa Yoav Galant.
The #ICC condemns the issuance by the US of an Executive Order seeking to impose sanctions on its officials and harm its independent and impartial judicial work. https://t.co/wxWxzsih7A
— Int’l Criminal Court (@IntlCrimCourt) February 7, 2025
Para Trump, las recientes acciones de la CPI “sientan un precedente peligroso, poniendo en riesgo directamente al personal actual y anterior de Estados Unidos, incluidos los miembros en servicio activo de las Fuerzas Armadas, al exponerlos a acoso, abuso y posible arresto”.
Esa “conducta maligna”, en su opinión, “amenaza con infringir la soberanía de Estados Unidos y socava la labor crítica de seguridad nacional y política exterior del Gobierno estadounidense” y de sus aliados.
Reacción
La CPI condenó este viernes la orden ejecutiva de Trump y considera que va a “perjudicar su labor judicial independiente e imparcial.
En respuesta, subrayó que “se mantiene firme junto a su personal y se compromete a seguir brindando justicia y esperanza a millones de víctimas inocentes de atrocidades en todo el mundo” en todas las investigaciones que tiene abiertas.
“Hacemos un llamamiento a nuestros 125 Estados Parte, a la sociedad civil y a todas las naciones del mundo a unirse en defensa de la justicia y los derechos humanos fundamentales”, agregó el tribunal en un breve comunicado.
Restricciones
Aunque se destaca que Washington sigue comprometido con la rendición de cuentas, se pide que la CPI respete su decisión y la de otros países de no someter a su personal a la jurisdicción de esa corte.
La orden contempla restricciones financieras así como la restricción de visados a individuos de la CPI, así como su familia inmediata (pareja e hijos), que colaboren en investigaciones del tribunal contra ciudadanos estadounidenses o aliados de Washington.
Así, la entrada “sin restricciones” de inmigrantes y no inmigrantes que se considere que cumplan los criterios marcados se tacha de perjudicial y se suspende, a menos que desde el Departamento de Estado se determine lo contrario con base en recomendaciones de la fiscal general, Pam Bondi.
Para Trump, cualquier esfuerzo de la CPI para investigar, arrestar o procesar a personas protegidas “constituye una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos”, razón por la que dijo declarar “una emergencia nacional para abordar esa amenaza”.
En los próximos 60 días, se pidió al Departamento del Tesoro que entregue una lista con personas adicionales que puedan verse afectadas por esta medida.
Su firma llegó después de la reunión de Trump el martes con Netanyahu, a quien en noviembre la CPI señaló con una orden de arresto por presuntos crímenes de guerra y de lesa humanidad en la Franja de Gaza.
Una guerra desde 2020
Durante su primer mandato, Trump impuso sanciones contra la entonces fiscal de la CPI, Fatou Bensouda, y uno de sus principales asesores debido a una investigación del tribunal sobre presuntos crímenes de guerra cometidos por tropas estadounidenses en Afganistán.
Corte Penal Internacional dicta orden de arresto contra Netanyahu por crímenes de guerra en Gaza
La medida de Trump llega después de que la semana pasada los demócratas del Senado, en minoría en esa Cámara, bloquearan un intento liderado por los republicanos para sancionar a la CPI en respuesta a sus órdenes de arresto contra Netanyahu y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, por la ofensiva israelí en Gaza.
La CPI se creó a través del Estatuto de Roma, es un tribunal internacional con la misión de juzgar a personas acusadas de crímenes de guerra, lesa humanidad y genocidio. Estados Unidos, China, Rusia e Israel no son miembros de la corte y, por lo tanto, no reconocen su jurisdicción.
Este jueves Trump también firmó otro decreto contra el “sesgo anti-cristiano”.
Con información de EFE y CNN.