Un ataque con cuchillo en Austria este sábado, que dejó un muerto y varios heridos, fue un atentado islamista, de acuerdo con el Gobierno de ese país.
En el hecho, ocurrido en Villach, una localidad de unos 58 mil habitantes, perdió la vida un adolescente de 14 años, en tanto otras cinco personas resultaron heridas.
El ataque fue realizado por un sirio de 23 años, con residencia en la nación europea y sin antecedentes penales, quien se radicalizó en Internet, según las autoridades austriacas.
El ministro del interior, el conservador Gerhard Karner, explicó a la prensa que las primeras investigaciones apuntan a vínculos del atacante con el Estado Islámico.
El hombre fue capturado luego del atentado y en su apartamento se encontró la bandera de la organización yihadista.
El Gobierno austríaco califica de “atentado islamista” el ataque en el que un sirio de 23 años acuchilló mortalmente este sábado a un niño de catorce años e hirió a otras cinco personas.https://t.co/2H28TbnDGM pic.twitter.com/4Y3SzU2RBB
— EFE Noticias (@EFEnoticias) February 16, 2025
Respuesta “con determinación”
Karner comentó que junto al duelo y la solidaridad con la familia del fallecido también es “comprensible” la ira y la rabia contra “un atacante islamista que apuñaló indiscriminadamente a personas inocentes en esta ciudad”, reseña EFE.
Según el despacho, el ministro anunció que se aplicarán controles masivos sin motivo previo entre “grupos concretos”, entre los que citó a los solicitantes de asilo de Siria y Afganistán.
Además, abogó por cambiar la ley para aplicar medidas más fuertes de seguridad, así como por “encerrar y deportar” potenciales islamistas y, en general, actuar con “determinación”.
El ataque en Villach ocurre meses después de que se frustrara en agosto la organización de un ataque suicida durante un concierto de Taylor Swift en Viena, y apenas unos días después de otro ataque en Múnich, Alemania, por parte de un ciudadano afgano, que dejó decenas de heridos y dos fallecidos hasta el momento.
Además, tiene lugar en medio de tensiones políticas en Austria, donde el ultraderechista Partido de la Libertad (FPO) —ganador de las más recientes elecciones parlamentarias y férreo crítico de la inmigración—, se ha visto impedido de formar un gobierno de coalición.
Tras el atentado, el líder de ese partido, Herbert Kickl, aseguró que “ningún migrante podría cometer un asesinato o cualquier otro delito en nuestro país si no estuviera en Austria en primer lugar”.
Por su parte, el líder de los socialdemócratas, Andreas Babler, lamentó la tragedia y afirmó que sobre el atacante debía caer “todo el peso de la ley”.