Europa occidental sigue prestándole dinero a Ucrania para que esta le haga frente a la invasión rusa. Este martes, los ministros de Finanzas de los 27 países de la Unión Europea dieron luz verde a la concesión de 1 000 millones dólares en préstamos al gobierno ucraniano.
Este último paquete financiero eleva a 2 200 millones de euros el importe total de la ayuda financiera europea a Kiev en lo que va de año, desde el inicio de la invasión el 24 de febrero, cuando se aprobó el primer préstamo.
A mediados de mayo la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, propuso una ayuda adicional de hasta 9 000 millones. El desembolso de estos 1 000 millones forma parte de esa iniciativa, que coincide con los avances rusos en el este de Ucrania y con el aumento de las bajas en ambos bandos.
“Esto dará a Ucrania los fondos necesarios para cubrir necesidades urgentes y asegurar el funcionamiento de infraestructuras críticas“, dijo en un comunicado Zbynek Stanjura, ministro de Finanzas de República Checa, que ostenta la presidencia rotatoria del bloque.
Ucrania dijo la semana pasada que su reconstrucción de posguerra hasta ahora tendrá un costo de 750 000 millones de dólares. Mientras, se calcula que el gobierno de Kiev necesita alrededor de 5 000 millones de euros mensuales para mantener su economía a flote.
Los países del Grupo de los Siete, incluyendo Estados Unidos, se han comprometido a ayudar al país a cubrir sus necesidades de financiamiento a corto plazo, además de proporcionar ayuda militar a Kiev e imponer amplias sanciones económicas contra Rusia.
La guerra, que dura ya cinco meses, está teniendo repercusiones económicas y sociales que van desde la posible escasez de alimentos en África hasta las interrupciones en el suministro de energía en la Unión Europea, lo cual, a su vez, aumenta el riesgo de una recesión global.