Rusia “no aceptará“ un tope de precios para su petróleo y está analizando cómo responder, dijo el Kremlin en respuesta a un acuerdo de las potencias occidentales.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, dijo que Moscú se había preparado para el anuncio del viernes sobre el tope de precios por parte del Grupo de los Siete (G7), la Unión Europea y Australia, informó la agencia estatal de noticias rusa TASS.
“No aceptaremos este tope“, dijo la agencia de noticias RIA. Rusia llevaría a cabo un rápido análisis del acuerdo y respondería después.
Rusia ha dicho en repetidas ocasiones que no suministrará petróleo a los países que apliquen el tope, postura reafirmada por Mijail Ulianov, embajador de Moscú ante las organizaciones internacionales en Viena. “A partir de este año, Europa vivirá sin el petróleo ruso“, dijo.
El tope de precios del G7 permitirá a los países que no pertenecen a la UE seguir importando crudo ruso por vía marítima, pero prohibirá a las compañías navieras y de seguros manejar cargamentos de crudo ruso en todo el mundo, a menos que se venda por menos de 60 dólares.
Oferta mundial de petróleo será recortada en medio de la actual crisis energética
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo que el tope beneficiará especialmente a los países de ingresos bajos y medianos que han soportado el peso de los altos precios de la energía y los alimentos.
“Con la economía rusa ya en contracción y su presupuesto cada vez más ajustado, el tope de precios recortará inmediatamente la fuente de ingresos más importante de Putin“, dijo Yellen en un comunicado.
La embajada rusa en Estados Unidos criticó lo que llamó una “peligrosa medida occidental“ y dijo que Moscú seguiría buscando compradores para su petróleo.
“Pasos como estos tendrán como resultado inevitable el aumento de la incertidumbre y la imposición de mayores costos para los consumidores de materias primas. Confiamos en que el petróleo ruso seguirá teniendo demanda“, dijo.