Dispositivos de mensajería electrónica, conocidos como buscapersonas (beepers) utilizados por miembros del grupo armado libanés Hezbollah explotaron casi simultáneamente en el Líbano y Siria en una acción sin precedentes que hace temer una inminente guerra total con Israel.
Preliminarmente, el sabotaje mató a cerca de una decena de personas, incluida una niña de 8 años, e hirió a miles más, colapsando las salas de urgencias de los hospitales, que están atendiendo a las víctimas, entre ellas el embajador iraní en Beirut, Moytaba Amani.
De los heridos por las explosiones, unos 200 están en condición grave y la mayoría presentaba heridas en la cara, la mano o alrededor del abdomen.
Según detalló el grupo político y militar libanés en un comunicado, después de examinar todos los hechos actuales, los datos y la información disponible, Israel “es plenamente responsable de esta agresión criminal que afectó a civiles”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores del Líbano prepara una demanda ante el Consejo de Seguridad de la ONU tan pronto como se complete la recopilación de datos relacionados con el ataque.
Beepers por móviles
Aparatos de mensajería y localización de pequeño tamaño que no necesitan tarjeta SIM, ni conexión a internet, los buscapersonas que explotaron habían sido adquiridos recientemente por Hezbollah.
La adquisición siguió luego de que el líder del grupo, Hassan Nasralah, ordenara a sus miembros que dejaran de usar celulares, advirtiendo que podrían ser rastreados por la inteligencia israelí.
Según un despacho del pool estadounidense The Associated Press (AP), este martes alrededor de las 3:30 de la tarde, hora local, los buscapersonas comenzaron a calentarse y luego explotaron en los bolsillos y manos de quienes los portaban, particularmente en un suburbio del sur de Beirut y en la región de Beká, en el este del Líbano, donde Hezbollah tiene una fuerte presencia.
Igualmente explotaron en Damasco, la capital de Siria, donde varios miembros del grupo de resistencia resultaron heridos.
The Associated Press se puso en contacto con el ejército israelí, pero sus voceros se negaron a cualquier comentario.
En Washington, el vocero del Departamento de Estado, Matthew Miller, dijo que Estados Unidos “no sabía de esto con anterioridad” y no estuvo involucrado. “En este momento estamos recabando información”, indicó.
Un video que circula en internet muestra a un hombre en un mercado cuando la bolsa que lleva en su cadera explota; él cae al suelo y la gente que está cerca huye.
Los fotógrafos de AP en los hospitales dijeron que las salas de emergencia estaban saturadas. A algunos pacientes les faltaban manos o les volaron pedazos de las piernas cerca del área del bolsillo.
Solidaridad árabe
Varios países árabes mostraron de inmediato su apoyo a Líbano después de la explosión y coincidieron con Hezbullah de que la operación lleva la paternidad de Israel.
Por un lado, el ministro de Asuntos Exteriores jordano, Ayman al Safadi, mostró su total rechazo a “cualquier acción que amenace la seguridad del Líbano”, y dijo estar dispuesto a prestar asistencia a los heridos.
En la misma línea, el ministro de Exteriores egipcio, Badr Abdelati, dijo que el presidente Abdelfatá al Sisi ha dispuesto brindarle a Beirut todo el apoyo necesario, según recoge L’Orient-Le Jour.
Por su parte, las autoridades iraquíes anunciaron que enviarán equipos médicos y de emergencias para colaborar con las operaciones en Líbano ante la oleada de heridos.
Los tradicionales aliados de Hezbollah, las milicias palestinas, los rebeldes hutíes de Yemen, e Irán ya mostraron su respaldo a Líbano y no han dudado en señalar al “enemigo sionista” por lo ocurrido. El hecho, a su vez, hizo subir los precios de petróleo en los mercados internacionales ante el temor de una guerra generalizada en el Medio Oriente.
Guerra total inminente
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció este martes que el retorno de los civiles del norte de Israel, desplazados por los combates con el movimiento Hezbollah en la frontera con el Líbano, es una de las prioridades de su gobierno, más allá de la guerra en Gaza contra Hamás
“El gabinete político y de seguridad actualizó esta tarde los objetivos de la guerra para incluir el siguiente apartado: el regreso seguro de los habitantes del norte a sus hogares”, explicó la oficina del jefe de gobierno israelí en un comunicado.
Los intercambios de golpes casi a diario entre ambos bandos han provocado el despoblamiento de las respectivas zonas limítrofes.
La hasta ahora guerra contenida ha causado más de 600 muertos en el Líbano, en su mayoría combatientes, pero también 141 civiles, de acuerdo con un balance de la agencia AFP, que para Israel cifra la muerte de al menos 24 soldados y 26 civiles desde el pasado octubre.