Jim Mattis, secretario de Defensa de Estados Unidos, visitó el jueves la base naval de Guantánamo para “desear felices fiestas a los militares apostados allí” –reseña AP. Se trata del primer viaje de un jefe del Pentágono a la base en casi 16 años y ocurre en medio de incertidumbre sobre qué hará el gobierno de Donald Trump con la prisión.
Mattis se disponía a reunirse con la tropa pero se informó que no irá a las instalaciones de detención ni hablará sobre los detenidos en la base.
El presidente Trump no ha ordenado la liberación de ninguno de los detenidos en Guantánamo, ni ha añadido a ninguno en la lista de los que oficialmente ya pueden salir en libertad o ser enviados a un tercer país.
Mattis es el primer secretario de defensa en visitar la Bahía de Guantánamo desde que lo hizo Donald Rumsfeld en enero de 2002, apenas semanas después de la llegada de los primeros prisioneros desde Afganistán. El centro de detención fue erigido para confinar a presuntos terroristas tras los ataques de 11 de septiembre de 2001.
El secretario de Defensa llegó a Guantánamo la noche del miércoles y estuvo acompañado por un reportero de AP.
En el centro de reclusión permanecen 41 detenidos, de los cuales 10 han sido encausados por una comisión militar y 5 oficialmente ya pueden salir, pero el gobierno actual no ha tomado medidas al respecto.
Esto implica que 26 permanecen en detención indefinida aunque algunos al final podrían recibir también la orden de liberación o podrían ser procesados. Grupos de abogados están preparando nuevos recursos judiciales, al argumentar que si no se deja en libertad a los presos, el gobierno no tiene fundamento legal para decir que el centro de detención es una medida temporal en tiempos de guerra.
El gobierno de Trump no ha dejado en libertad a ningún prisionero y no añadió ningún nombre a la lista de quienes pueden regresar a sus casas o ser reubicados en un tercer país. Su predecesor transfirió a 197 personas y el expresidente George W. Bush a más de 500.
El actual gobierno no ha anunciado su política sobre el centro de detención. Pero antes de asumir la presidencia, Trump dijo en Twitter que no habría más liberaciones en “Gitmo”, como se conoce a la base. “Estas son personas extremadamente peligrosas y no deberían poder volver al campo de batalla”, escribió.
AP / OnCuba