De acuerdo con Naji Sarhan, diputado del Ministerio de Viviendas y Obras Públicas de Gaza, una evaluación inicial de la destrucción causada por los bombardeos israelíes arroja que al menos 2 000 viviendas fueron totalmente destruidas.
Israel lanzó cientos de ataques aéreos sobre esa zona superpoblada apuntando indiscriminadamente a edificios residenciales, comerciales y gubernamentales.
Sarhan dijo que la mayoría de las fábricas de la zona industrial de Gaza fueron destruidas o dañadas. Asimismo, calculó las pérdidas financieras en alrededor de 150 millones de dólares.
Por su parte, las Naciones Unidas dieron a conocer que en Gaza aproximadamente 800 000 personas no tienen acceso regular a agua corriente, toda vez que casi el 50% de la red resultó dañada por los bombardeos. Citando al Ministerio de Viviendas y Obras Públicas de Gaza, la oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios dijo que casi 17 000 unidades residenciales y comerciales han sido dañadas o destruidas.
Un alto al fuego entró en vigor el viernes después de una campaña de once días que dejó más de 250 muertos, la gran mayoría palestinos, y provocó una devastación generalizada en la ya empobrecida Franja de Gaza, gobernada por Hamas.
La ONU dijo que 53 instalaciones educativas, seis hospitales y 11 centros de atención primaria de salud han sido afectados desde el 10 de mayo. Un centro de salud resultó gravemente dañado, mientras que un hospital no está funcionando debido a la falta de electricidad.
Las escuelas de Gaza permanecen cerradas, lo cual afecta a casi 600 000 niños.