Al menos 19 personas murieron este martes en un bombardeo contra una zona designada humanitaria por el propio ejército israelí, informó el ministerio de Salud de Gaza.
Pero un comunicado de los militares invasores alegó haber atacado un “centro de mando” del movimiento palestino Hamás, una versión rápidamente desmentida por el grupo resistente.
“La zona fue bombardeada sin previo aviso”, dijo a la agencia francesa AFP un palestino desplazado que prefirió no dar su nombre. “Solo hay tiendas de campaña a nuestro alrededor, refugios, no hay nada aquí. Vimos los misiles cayéndonos encima”, agregó espantado.
El bombardeo se produjo en el campo de desplazados de Al Mawasi en Jan Yunis, la mayor ciudad del sur de la Franja de Gaza, donde el pasado 13 julio perecieron al menos 71 personas y cerca de 300 resultaron heridas luego de un ataque israelí con tres misiles que impactaron el corazón del área humanitaria al oeste de Jan Yunis.
Se trata de un área del litoral mediterráneo designada zona segura por Israel al inicio de la guerra hace más de 11 meses, cuyo balance hasta el momento cifra en 41 020 los muertos documentados en el enclave. Al comienzo del conflicto tenía una población de 2,4 millones de habitantes.
La ONU asegura que la mayoría de víctimas son mujeres y niños. El secretario general de la organización, Antonio Guterres, condenó el ataque del martes y dijo que era “inadmisible” recurrir a “armas pesadas en zonas densamente pobladas”.
El bombardeo también fue condenado “enérgicamente” por el coordinador especial de la ONU para el proceso de paz en el Medio Oriente, Tor Wennesland, y por Reino Unido, Turquía, Egipto y Arabia Saudita.
Aysenur Ezgi Eygi, un asesinato accidental
Entretanto, el ejército israelí reconoció este martes que sus fuerzas probablemente mataron “sin querer” a la activista turco-estadounidense Aysenur Ezgi Eygi durante una protesta cerca de la localidad de Nablus, en Cisjordania ocupada, el pasado día 6 de septiembre.
Luego de una investigación sobre los hechos el ejército aseguró que “es altamente probable que fuera alcanzada sin querer por fuego israelí que no iba dirigido contra ella”, sino contra un presunto instigador en una manifestación que calificó de “disturbio”.
Ocupación de Gaza, graves consecuencias
El jefe de la sección de Derecho internacional en la Fiscalía Militar y asesor legal del Ministerio israelí de Relaciones Exteriores , Yoel Zinger, advirtió en un informe publicado en el diario Haaretz las graves consecuencias del control militar total o parcial de Gaza por la entidad ocupante.
También cuestionó la contradicción entre la intención del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de mantener un control militar en Gaza en la posguerra, y la aspiración del ministro de Defensa, Yoav Galant, de evitar el establecimiento de un gobierno castrense en la región.
En su opinión, Netanyahu busca mantener el control militar israelí en Gaza incluso después de un alto el fuego al pretender retener el corredor Filadelfia, en la frontera con Egipto, y el eje de Netzarím, que corta en dos a la franja de Gaza.
El gobierno no podrá enterrar la cabeza en la arena, y no estará lejos el día en que rindan cuentas, ya sea en el Tribunal Supremo israelí, en Washington o en La Haya, concluyó el periódico fundado en 1919 y que se publica en hebreo.