El papa Francisco continúa su proceso de convalecencia y recuperación en la Casa Santa Marta, adyacente a la basílica de San Pedro, pero tuvo que delegar en varios cardenales las celebraciones de los ritos de la Semana Santa, consignó un despacho de la agencia Prensa Latina.
Una nota de la oficina de prensa de la Santa Sede, divulgada en el sitio digital del diario Vatican News, detalla que el Sumo Pontífice muestra “mejoras en los aspectos motor, respiratorio y vocal”, con uso de oxígeno de alto flujo residual y limitado a fines terapéuticos siempre en horario vespertino, cuando resulta necesario.
Se alargan de manera gradual los períodos en los que Francisco “logra prescindir” de las boquillas de oxígeno, a la vez que continúa su fisioterapia con buenos resultados, añade el comunicado.
De manera limitada, el jefe de la iglesia romana, de 88 años, continúa desarrollando algunas de sus funciones papales.
Se trata de una agenda que incluye breves “encuentros de trabajo con algunos superiores de la curia” y entre sus últimas actividades, la preparación de las meditaciones del Vía Crucis, que se publicarán el viernes 18 de abril.
Sustitutos en los ritos
La oficina de prensa informó además que, por delegación del Obispo de Roma, la Misa Crismal, prevista para la mañana del Jueves Santo, será celebrada por el cardenal Doménico Calcagno, presidente emérito de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA).
Por otra parte, la celebración de la Pasión estará presidida por el cardenal Claudio Gugerotti, prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, mientras que el Vía Crucis, que como cada año tendrá lugar en el Coliseo, estará a cargo del cardenal Baldo Reina, vicario general de la diócesis de Roma.
Igualmente, se desconoce aún sobre la presencia del papa Francisco en los ritos del Triduo Pascual.
El calendario de celebraciones en San Pedro fue publicado. Se supo que la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo en la Basílica, prevista para las 18:00 horas, será presidida por el cardenal Mauro Gambettti, arcipreste de ese templo católico vaticano.
Al finalizar la liturgia, los fieles podrán participar de la adoración eucarística en el Altar de la Reposición, que se prolongará hasta las 22:00 horas.
En el programa litúrgico aparece que el Viernes Santo, a las 09:00 hora local, se celebrará el Oficio de Lecturas y Laudes en la Capilla del Coro, y posteriormente tendrá lugar la ostensión de la reliquia de la Santa Cruz desde la Logia de la Verónica.
Entretanto, el Sábado Santo se repetirá el mismo esquema matutino y a las 9:00 hora local se celebrarán el Oficio de Lecturas y las Laudes, también en la Capilla del Coro, marcando el clima de silencio y espera previo a la Vigilia Pascual.
Acutis, primer santo de la generación Y
Carlo Acutis, un niño italiano nacido en Reino Unido que creó páginas web para difundir su fe, será proclamado este mes de abril el primer santo de la Iglesia católica de la generación millenial, al mismo nivel que la Madre Teresa y Francisco de Asís.
No hay duda de que era especial, dijo a Reuters su madre, Antonia Salzano Acutis. Sin embargo, en muchos aspectos, dijo, era como cualquier otro adolescente.
Acutis, quien aprendió varios lenguajes informáticos y creó páginas web para su parroquia y la Iglesia en general, murió de leucemia a los 15 años en 2006.
A medida que crecía su fama devota y su figura avanzaba por la vía oficial hacia la santidad, su cuerpo fue trasladado a la ciudad de Asís, en el centro de Italia, de acuerdo con sus últimos deseos. Allí fue enterrado con un molde de cera elaborado a su imagen, vestido con su chándal, vaqueros y zapatillas deportivas. Desde entonces, las multitudes se agolpan ante el ataúd, que cuenta con un cristal transparente.
Se espera que decenas de miles de personas asistan a la ceremonia de canonización en la plaza de San Pedro el 27 de abril. Las autoridades vaticanas esperan que el papa Francisco, que aún se recupera de una grave neumonía doble, presida la ceremonia, reportó la agencia Reuters.
Gaudí, “venerable”
Por su parte, el arzobispo de Barcelona, el cardenal Joan Josep Omella, destacó la “alegría de toda la comunidad cristiana” por la declaración del célebre arquitecto catalán Antoni Gaudí (1852-1926) como “venerable” por parte del papa Francisco, el paso “inmediato” a ser reconocido beato y santo.
Omella destacó que Gaudí trabajó mucho la fe y quiso dar la gloria a Dios en la Sagrada Familia, una basílica barcelonesa iniciada por el arquitecto en 1882 que todavía está en construcción.
Se trata de la obra maestra de Gaudí y el máximo exponente de la arquitectura modernista catalana. Es el monumento más visitado de España y la iglesia más visitada de Europa tras la basílica de San Pedro del Vaticano. Cuando esté finalizada,hacia 2026, en el centenario de la muerte del creador, será la iglesia cristiana más alta del mundo.