Camisetas de todos los colores, banderas de Colombia y cánticos alusivos al uribismo colmaron la celebración de Iván Duque, elegido presidente de Colombia tras ganar las elecciones al izquierdista Gustavo Petro.
A la cancha polideportiva del Centro Empresarial y Recreativo El Cubo, en Bogotá, llegaron centenares de personas vestidas con los colores de los movimientos que apoyaron a Duque.
Uno de los grupos más grandes lo conformaban militantes del partido evangélico Mira, quienes vestidos de azul y entonando cánticos contagiaron a los demás simpatizantes para celebrar el triunfo del aspirante uribista.
“Se vive, se siente, Duque presidente” y “Él es, él es, Duque es el que es”, fueron dos de los estribillos con los que la gente se animó y comenzó a saltar.
Duque ganó los comicios al cosechar 10,3 millones de votos (53,98 por ciento), frente a Petro, que consiguió 8 millones de papeletas (41,81 por ciento).
En televisión también avivaron la simpatía por el candidato, pues cada vez que aparecía su imagen las vuvuzelas, los pitos y los gritos llenaban el polideportivo.
Con los resultados confirmados, personalidades políticas que apoyaron la candidatura de Duque aparecieron en el recinto, como es el caso del ex procurador Alejandro Ordóñez, el ex candidato presidencial Óscar Iván Zuluaga o la representante a la Cámara uribista María Fernanda Cabal, quien dijo a Efe “que triunfó la dignidad del pueblo colombiano”.
“No todo vale, recuperamos la esperanza y todos cabemos en Colombia. El populismo ya no es un tiquete válido para comprar en un país que quiere vivir en desarrollo”, afirmó entre sonrisas la congresista del Centro Democrático, que ocupará un escaño en el Senado para el periodo 2018-2022.
El que no estuvo en la celebración fue el ex presidente Álvaro Uribe, cuyo nombre fue coreado en varias ocasiones, y quien afirmó a periodistas en Rionegro, municipio del departamento de Antioquia (noroeste) en que reside, que hay un reto muy grande para acompañar al “presidente Iván Duque” y a la “vicepresidenta Marta Lucía Ramírez”.
Entre tanto, un grupo de jóvenes colombo-venezolanos enarboló la bandera del país caribeño en la celebración y comenzó a cantar: “Y no, y no, y no me da la gana una dictadura como la cubana”.
Con el paso de los minutos los espacios se comenzaron a reducir en el polideportivo con la llegada de más y más personas, que esperaban con ansias a Duque y a la vicepresidenta electa, a quien recibieron al unísono con la frase “Marta es mi vice, Colombia lo dice”.
Con la llegada de Duque y de Ramírez estalló en júbilo el Cubo, que se llenó de confeti y de los aplausos y los gritos de los asistentes, por culpa de cuya ensordecedora celebración el presidente electo tuvo que detener en un par de ocasiones su discurso.
Duque, que en el escenario se abrazó con su jefe de campaña, Luis Guillermo Echeverri, apeló a la unidad para superar la polarización en su primer discurso como presidente electo y la gente, emocionada y animada, lo vitoreó y celebró cada una de las palabras que dijo.
“¡Qué viva Colombia! Pa’ delante, muchas gracias”, fueron las frases con las que concluyó su discurso Duque, que luego fueron replicadas por los asistentes antes de comenzar a salir del polideportivo con una sonrisa de oreja a oreja.
A la salida, los simpatizantes de Duque continuaron con la celebración en las calles, con cánticos y gritos, y en medio de la algarabía se fueron yendo uno a uno para sus casas para terminar con la jornada electoral.
EFE / OnCuba