La película cubana de ciencia ficción El extraordinario viaje de Celeste García (Arturo Infante, 2018) cosecha sus primeros reconocimientos cubanos en el Festival Internacional de Cine de Gibara, donde recibió los premios Lucía al Mejor largometraje de ficción y a la Mejor actriz, en la persona de su protagonista María Isabel Díaz, conocida y apreciada entre los públicos cubanos como la protagonista de la cinta Una novia para David (Orlando Rojas, 1987) y de la serie televisiva La hora de las brujas, transmitida durante los años noventa.
El jurado de Ficción, integrado por los realizadores Fernando Pérez —su presidente y Premio Lucía de Honor este año—, Carlos Lechuga, Mauro Sarser de Uruguay, Pablo Solarz de Argentina y el gestor cutural Freddy Ginebra, fundamentó su decisión en la “autenticidad y capacidad de representar con humor e imaginación la realidad cubana” de que hace gala la ópera prima de Infante.
Merecedora recientemente del Gran Premio del Jurado en el Concurso de Nuevos Directores de la última edición del Festival Internacional de Cine de Seattle, El extraordinario viaje… fue presentada por primera vez a los públicos cubanos en la edición 40 del Festival de Cine de La Habana del pasado año, y estrenada comercialmente en las salas del país, donde se pudo apreciar durante varias semanas. Además, cuenta con la producción de la conocida Claudia Calviño (Juan de los muertos, Melaza, Santa y Andrés, Yuli) y su empresa independiente Producciones de la 5ta. Avenida.
Los éxitos de Cuba en el FIC Gibara número 15 no se quedaron en …Celeste…, pues otra cinta nacional, El cementerio se alumbra (Luis Alejandro Yero, 2018) obtuvo el premio Lucía al Mejor cortometraje documental.
El premio a Mejor guion inédito recayó en el texto titulado El último, del también cubano Amilcar Salatti, quien fuera co-escritor de la reciente cinta Inocencia (Alejandro Gil, 2018).
FIC Gibara no otorgó este año premio Lucía a Mejor actuación masculina, pues el referido jurado decidió “priorizar la actuación al género” y además de María Isabel Díaz, premió a otra segunda actriz: Samantha Mugatsia, protagonista de la película Rafiki (Wanuri Kahiu, 2018) de Kenia, que aborda las dificultades que tiene que afrontar el amor entre dos mujeres en un contexto altamente homofóbico y lesbofóbico.
La “excelente calidad cinematográfica” y “la fineza en el trazado psicológico de su protagonista”, según dejó sentado el jurado en el acta correspondiente, mereció para la cinta iraní Retouch (Kaveh Mazaheri, 2017) el premio Lucía a Mejor cortometraje de ficción. Breve minutos bastan para estructurar una historia de emancipación y rebelión extremas en un país como Irán, donde el machismo y la misoginia definen el rol de las mujeres.
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La cinta Dos Fridas, coproducida entre Costa Rica y México de 2018 conquistó los apartados de Mejor dirección para la costarricense Ishtar Yacín y de Mejor fotografía para el español Mauro Herce.
Protagonizada por la gran actriz portuguesa María de Medeiros, la película apela a la relación desarrollada entre la pintora mexicana Frida Kahlo y su enfermera Judith Ferreto durante las últimas épocas de la vida de la artista.
De manera muy excepcional, el jurado de Ficción otorgó Premio Especial a la obra teatral 10 millones, escrita y dirigida por Carlos Celdrán para Argos Teatro.
Presentada en Gibara durante las jornadas del Festival, el jurado justificó esta singular decisión “porque nos atravesó y nos conmovió, porque el teatro es la fuente de la que surgen las actrices y los actores y por el agradecimiento a su autor y sus intérpretes”.
Desde el pasado año, FIC Gibara cuenta con un Jurado de la Prensa Nacional, que también premia los largometrajes de ficción más destacados. Y la discordancia entre sus criterios y los de los otros jurados ha determinado desde entonces su presencia en el certamen.
Los críticos Joel del Río, José Luis Estrada, Rafael Grillo, José Rojas Bez y Lino Verdecia optaron por galardonar el riesgo, la búsqueda formal, el discurso complejo y mordaz de la cinta china independiente Animal World (Lam Can-zhao, 2018), y la capacidad para “conferirle un nuevo sentido al naturalismo cinematográfico, desde la combinación del testimonio documental y la representación fictiva” que tiene la película española Los días que vendrán (Carlos Marques-Marcet, 2019) de España.
El jurado de Documental, Animación y Videoarte estuvo integrado por la cineasta y activista cubana Lizette Vila —su presidente—, el realizador cubano Enrique “Kiki” Álvarez, el promotor cultural español Javier Muñiz, el fotógrafo y productor uruguayo José María “Cote” Romero y el realizador estadounidense Gerard Hooper. Por unanimidad otorgaron el premio Lucía al Mejor largometraje documental a la obra El camino de Santiago (Tristán Bauer, 2018).
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Según los especialistas, esta película amerita “un despliegue eficaz de los recursos expresivos del cine de indagación para construir un discurso que logra trascender el destino de su protagonista y lo convierte en síntoma de la amenaza y la violencia ejercida por el poder sobre las personas que disienten de las estructuras socioeconómicas y políticas determinantes sobre sus vidas”.
Otros dos largometrajes documentales recibieron menciones: Las Cinéphilas (María Álvarez, 2017) de Argentina, y El proxeneta. Paso corto, mala leche (Mabel Lozano, 2018) de España.
https://www.youtube.com/watch?v=_KIsbREnc0Y
El joven director de El cementerio se alumbra, Alejandro Yero, recibió el pasado año el Premio Coral al Mejor cortometraje documental en el Festival de La Habana por su obra Los viejos heraldos (2018), que también triunfó en la Muestra Joven ICAIC de este año, y pudo ser apreciado en FIC Gibara como parte de la Muestra paralela. Por lo que estamos hablando de un creador de emergente prestigio en la palestra fílmica nacional.
El cementerio… mereció el Lucía a Mejor cortometraje documental por “estructurar una mirada sobre la realidad cubana que, desde el punto de vista de su realizador y el uso dialéctico de la expresión cinematográfica, apunta el eterno florecimiento de la vida en un escenario determinado por el tiempo detenido y la cercanía de la muerte”, según el jurado.
Yero fue secundado por los documentales La última hija (Evi Karampatsou, 2018) de Chile y M/F/X (Koen Suidgeest, 2019) de Holanda, merecedores de dos menciones en el mismo apartado.
El más contemporáneo término de Video creación unificó las categorías más canónicas de videoarte y animación, a criterio de este jurado, por lo que el premio Lucía de este apartado recayeron en el cortometraje sueco La carga (Niki Lindroth von Bahr, 2017), por su “capacidad de proponer una reflexión sobre la fragilidad de la existencia frente a los condicionamientos sociales a través de metáforas que son a la vez rotundas e inquietantes”, según el criterio vertido en el acta. La obra suiza Selfies (Claudius Gentinetta, 2018) recibió una mención. Ambas piezas están estructuradas desde el lenguaje de la animación.
El premio Humberto Solás de Cine en construcción recayó en el proyecto mexicano de documental titulado El film justifica los medios, con guion y dirección de Juan Jacobo Castillo, y la producción de Laura Coronado.
En este jurado, presidido por el realizador español Vicente Monsonís, e integrado por los productores cubanos Reymel Delgado y Aldo Benvenuto Solás, el realizador sueco Beat Borter y el productor español Antonio Pozueco, también fue el encargado de premiar el guion inédito de Amilcar Salatti.
Trabajo en el Festival. Solo me gustaría aclarar que el tráiler de Animal World que tienen puesto en el trabajo, no es el de la película que se prensentó en Gibara. Comparte título y nacionalidad, pero no es la misma