En la Botica Triolet, de Matanzas, todo luce como hace más de un siglo. Los mismos potes y frascos para las medicinas, la caja registradora, el instrumental para preparar las recetas, los libros de
registro, los morteros, las esencias, la bicicleta de los mandados, la lámpara que anunciaba la guardia…
Este lugar, declarado Monumento Nacional, es la farmacia decimonónica mejor conservada de Cuba y probablemente de toda América. Es, desde hace algún tiempo, el Museo Farmacéutico, visita obligada si se pasa por la ciudad de los puentes.
Vea más del autor en su página personal.
HERMOSA!