Un gigantesco glaciar de Groenlandia que llegó a ser una de las masas de hielo que se achicaba más rápidamente en el planeta está creciendo de nuevo, de acuerdo con un estudio de la NASA.
El glaciar Jakobshavn perdía unos tres kilómetros de superficie y casi 40 metros de grosor al año alrededor de 2012. Pero comenzó a crecer de nuevo al mismo ritmo en los últimos dos años, según un estudio publicado el lunes por Nature Geoscience. Sin embargo, los autores de la investigación y otros científicos creen que esto pudiera ser temporal.
“Eso fue como una sorpresa. Como que nos acostumbramos a un sistema en retroceso”, dijo Jason Box, científico en clima y hielo del Sondeo Geológico de Dinamarca y Groenlandia. “La buena noticia es que es un recordatorio de que no está desapareciendo tan rápido, pero está desapareciendo”.
Box, quien no formó parte del análisis, dijo que el Jakobshavn “probablemente sea el glaciar más importante de Groenlandia porque descarga la mayor cantidad de hielo en el hemisferio norte. Para Groenlandia, es un rey”.
El hielo de Groenlandia se derrite a gran velocidad por el cambio climático. ¿Por qué este #glaciar en particular está creciendo? https://t.co/nwydY1o3nn
— National Geographic (@NatGeoEspana) March 26, 2019
Probablemente el glaciar revirtió su tendencia debido a un enfriamiento cíclico natural de las corrientes del Atlántico Norte, dijo el autor principal del estudio Ala Khazendar, experto en glaciares de la NASA y miembro del proyecto Oceans Melting Greenland. Khazendar y sus colegas dicen que esto coincide con un cambio en la Oscilación del Atlántico Norte, un fenómeno natural y temporal de enfriamiento y calentamiento de partes del océano que es como un primo distante de El Niño en el Pacífico.
Las aguas en la bahía Disko, donde el Jakobshavn llega al mar, se encuentran unos 2 grados Celsius (3,6° Fahrenheit) más frías que hace unos años, dijeron los autores del análisis.
Si bien estas son “buenas noticias” temporalmente, son malas a largo plazo porque indican que la temperatura del océano representa un papel más determinante en el decrecimiento y aumento de tamaño de los glaciares de lo que se pensaba, dijo Josh Willis, climatólogo de la NASA y coautor del estudio.
A lo largo de los años, el mar se ha estado calentando y seguirá haciéndolo debido al cambio climático creado por el hombre, dijo, resaltando que cerca del 90% del calor atrapado por los gases de efecto invernadero va a dar a los océanos.
“A largo plazo probablemente tendremos que elevar de nuevo nuestros pronósticos de incremento en el nivel del mar”, señaló Willis.
Piense en las temperaturas del océano cerca de Groenlandia como si fueran una escalera eléctrica que está subiendo lentamente a consecuencia del calentamiento global, dijo Khazendar. Pero en ocasiones la Oscilación del Atlántico Norte es como echarse un brinco unos escalones hacia abajo, o hacia arriba. El agua puede enfriarse y tener efectos, pero a largo plazo está calentándose y el derretimiento será peor, advirtió.
Cuatro científicos que no participaron dicen que el estudio y sus resultados son verosímiles.
Uno de ellos, Ian Joughin, científico especializado en hielo de la Universidad de Washington, pronosticó un cambio así hace siete años. En esta ocasión dijo que sería un “grave error” interpretar que los datos más recientes contradicen los conocimientos científicos que se han recopilado sobre el cambio climático.
Lo que está ocurriendo, dijo Joughin, es “en gran medida una irregularidad momentánea. En el mercado bursátil ocurren descensos de vez en cuando, pero en general la trayectoria a largo plazo es de alzas. Realmente esto es lo mismo”.