Los fanáticos de Nueva York y Nueva Jersey recibieron a Paul McCartney ayer jueves por la noche en el estadio MetLife con toda una apoteosis para el ícono mundial de la música y la cultura pop.
McCartney cumple 80 años el próximo sábado 18 de junio. El Beatle cerró su gira “Got Back“ por 13 ciudades de Estados Unidos, no muy lejos de donde habia empezado la historia de Estados Unidos con todas las cosas de los Beatles en la ciudad de Nueva York hace casi 60 años.
Hacia la mitad del espectáculo un rugido estalló desde los niveles superiores del estadio. Primero parecía ser un alboroto, un sonido como los que se escuchan cuando estalla una pelea. Pero no fue una pelea sino una erupción de júbilo.
The Beatles llegaron a Estados Unidos el 7 de febrero de 1964 al Aeropuerto Internacional JFK, a unas 19 millas al este del MetLife Stadium, entre los gritos de los jóvenes fanáticos. Más de 70 millones de estadounidenses, casi el 40% de la población total del país, los vieron en “The Ed Sullivan Show“.
En un momento de ese mismo año, ocuparon los cinco primeros lugares en las listas de éxitos estadounidenses, hazaña sin igual en la historia de la música.
“Todo cambió para The Beatles cuando llegamos a Estados Unidos“, dijo McCartney durante el show. “Sabemos qué canciones aman“. Esas canciones, dijo, son casi siempre clásicos de los Beatles.
“Las chicas en Inglaterra podían gritar“, bromeó. “Pero las chicas estadounidenses llevaron la beatlemanía a un nivel completamente nuevo“. Luego invitó a las mujeres de la audiencia a dar el distintivo grito de los Beatles, a lo que respondieron delirantes.
Bruce Springsteen, nativo de New Jersey, interpretó con McCartney “Glory Days“ y “I Wanna be Your Man“, lo que condujo a los himnos de los Beatles “Let It Be“ y “Hey Jude“ mientras la lluvia comenzaba a caer sobre el estadio.
El ícono del rock estadounidense y también nativo de Nueva Jersey, Jon Bon Jovi, subió al escenario hacia el final del concierto. Ofreció sus mejores deseos a Sir Paul y lanzó globos al aire.