La guerra en Ucrania ha llegado a los mil días y la operación ucraniana en Kursk, una especie de mini invasión a Rusia, a 100 días.
Las guerras son una anomalía civilizatoria a la que algunos pueblos, entre ellos los de Rusia y Ucrania que, como parte de la Unión Soviética, fueron arrastrados. En la ocasión, con impar heroísmo, combatieron juntos en una guerra patriótica contra la Alemania hitleriana.
Hoy, cuando la anomalía se ha transformado en aberración, un caprichoso curso de los acontecimientos los enfrenta en una guerra feroz que pudo ser evitada y puede ser detenida.
Explotando el factor sorpresa, una reducida fuerza ucraniana que nunca superó los 10 mil efectivos, unas decenas de blindados y sin apoyo aéreo, el 6 de agosto atravesaron la frontera con Rusia y, combatiendo, han resistido más de 100 días las embestidas de unas 50 mil tropas rusas incluida aviación y, según trascendidos, reforzadas por 10 mil norcoreanos, según el Pentágono.
Si resulta difícil asimilar las explicaciones, ninguna de ellas oficial y ninguna convincente, acerca de por qué, a pesar de la obvia superioridad económica, militar y demográfica de Rusia, la guerra en Ucrania avanza en su tercer año, es más difícil comprender cómo una pequeña incursión ucraniana se ha hecho fuerte y resisten en la región de Kursk de donde, según fuentes rusas, unas 200 mil personas han sido evacuadas.
La batalla de Kursk
Al estudiar los anales de la Gran Guerra Patria, como llamaron los soviéticos al capítulo de la II Guerra Mundial librado en su territorio, resaltan los nombres de Stalingrado, Leningrado, Moscú, Kiev y Kursk, escenarios de batallas decisivas.
La derrota de la Alemania nazi no se consumó en Berlín, sino en Kursk donde se libró la más grande batalla de tanques e infantería de la II Guerra Mundial.
Casi 800 mil efectivos alemanes contra más de un millón de combatientes soviéticos, 2500 tanques por bando, casi 40 mil piezas de artillería y unos 7 mil aviones, todos comandados por los mariscales Erich von Manstein por Alemania y Gueorgui Zhúkov por la URSS.
En espera del ataque, los soviéticos excavaron casi 10 mil kilómetros de trincheras, construyeron casi 700 puentes, 2 mil kilómetros de carreteras e instalaron alrededor de un millón de minas antitanques y antipersonales. En apoyo a las tropas regulares, los guerrilleros destruyeron alrededor de 300 locomotoras y 2 mil vagones de ferrocarril.
Los combates se prolongaron por más de un mes y casi un millón de alemanes y soviéticos fueron bajas.
Después de la batalla de Stalingrado, Hitler ordenó un postrer esfuerzo y se dispuso a lanzar otra ofensiva contra Rusia, para lo cual concentró en la región de Kursk una poderosa armada lista para aplastar la resistencia soviética y avanzar con el estilo de la guerra relámpago.
En la madrugada del cinco de julio de 1943, cuando casi 400 mil tropas alemanas esperaban a las 5:30 de la madrugada, hora señalada para el inicio de la ofensiva, inesperadamente se desató sobre ellos un huracán de fuego, procedente de 2 mil cañones soviéticos y cientos de aviones que literalmente destrozaron el dispositivo preparado para el ataque que ya no podía volverse atrás.
La exitosa maniobra soviética se debió a las informaciones suministradas por “Lucy”, dulce seudónimo adoptado por el alemán Rudolf Roessler, integrante de la “Orquesta Roja”, poderosa organización de espionaje al servicio de la Unión Soviética desplegada en Alemania y en toda la Europa ocupada por los nazis.
El 13 de julio, abrumado por la sucesión de derrotas, Hitler convocó al Alto Mando Alemán exponiendo su decisión de cesar la operación en Kursk y retirar lo que quedaba de las exhaustas, diezmadas y desmoralizadas tropas.
Con la victoria, la iniciativa estratégica pasó a manos de la Unión Soviética y nunca más Alemania fue capaz de organizar ninguna operación ofensiva. Allí comenzaron a retroceder sin parar hasta Berlín en 1945
Difícilmente la guerra de hoy termine así.
Obviamente, se confirma que Ucrania no puede ganar, pero es poco probable que sea obligada a rendirse. No estoy seguro de que Rusia gane ahora como lo hizo en 1945 y no imagino qué haría con la victoria. Negociar es la salida. ¿Lo harán? Allá nos vemos.
*Este texto fue publicado originalmente en el diario ¡Por esto! Se reproduce con la autorización expresa de su autor.
Yo no creo que se pudo evitar la guerra, Putin no quiere estar solo, y eso es precisamente lo que está pasando, las exrepúblicas soviéticas no quieren ser aliado de Putin, solo Bielorrusia, y el presidente de ese país lo ha hecho para con la ayuda de Putin conservar el poder, curiosamente, Ucrania era el país favorito de los rusos para emigrar después de España, Putin esta infiltrado Ucrania desde que llego al poder, en el 2004 enveneno a Viktor Jusjtjenko para poner a un proruso en el poder, pero el señor no murió y ganó las elecciones, Putin quiere a Ucrania de aliada, por eso hace la guerra,ese es su objetivo.
Jorge, yo leo todos sus artículos, muy interesantes. Sin embargo en este en particular veo una extrema simplificación. El conflicto al que usted se refiere es mucho más que un enfrentamiento entre Rusia y Ucrania. Es la guerra de la OTAN contra Rusia en el territorio de Ucrania y la pregunta es: ¿Por qué la OTAN con todo su potencial no ha podido vencer y por el contrario, como se reconoce públicamente está retrocediendo indeteniblemente?
Sorprendido por los errores en algunos datos y en la interpretación estratégica de la guerra qué se libra a amplia escala y en otros frentes, además de Kursk. Si bien es cierto que el contingente inicial de Ucrania en ese escenario fuera de al menos esa cantidad, las fuerzas que ha involucrado son su múltiplo varias veces. Y no solo la cantidad de efectivo sino el valor real de las unidades, todas ellas selectas. El territorio ocupado inicialmente se ha ido reduciendo, provocando un embotellamiento que amenaza con estrangularse y dejar en una situación precaria de cerco a esas unidades. No es fácil entrenar y ganarse en el fragor de la guerra a una unidad de elite, menos a várias. Calcule el daño inflingido a Ucrania. Por otro lado, y esto es válido para todos los teatros de operaciones, Rusia apenas ha utilizado una fracción de su potencial militar, y no solo pelea contra Ucrania sino contra el potencial militar de la OTAN. Difícilmente habría llegado Ucrania hasta el día de hoy, sin el apoyo logístico, financiero en equipos militares, y con el concurso directo de sus efectivos como “voluntarios” del lado ucraniano. En todo caso, sería válido preguntarse si el complejo militar industrial europeo y estadounidense están en condiciones de seguir supliendo de armas y municiones a Ucrania, con volúmenes de producción menores y a un costo de producción mucho mayor. Finamente, la guerra en Ucrania ha desangrado la economía europea y estadounidense. Ha ejercido su propio lastre en la política, con la elección de nuevos gobernantes en varios países de Europa y en Estados Unidos. Asique además del costo económico ha tenido uno de carácter político. Asistimos a un declive pronunciado y acelerado de las potencias europeas y principalmente de Estados Unidos. Le pueden dar las gracias a los sucesivos empantanamientos en Afganistán, Iraq, Ucrania y ahora con la renovada guerra de Israel contra Palestina y otros actores subnacionales que son el eje de la resistencia articulada por Irán.
BRAVO, estoy muy de acuerdo con lo que escribió, Rusia no está luchando contra ucrania solamente, sino también contra EEUU y la OTAN.
No hay evidencia ninguna de que Corea del Norte haya enviado 10 000 soldados, todo esto se invento para entregarle a ucrania miles de millones de dólares en armamento de todo tipo.
Generalmente se agradecen los artículos de Oncuba, por su equilibrio y profundidad. Este aunque sigue con el equilibrio carece de profundidad. Lo que está ocurriendo en Ucrania es mucho más profundo que un conflicto binacional. Comparando este conflicto con la 2da guerra mundial a la cual se hace referencia en este artículo, vemos que Alemania destrozó al ejército rojo en el año 1941, pero eso no bastó, porque la URRS tuvo las reservas necesarias para reponer a ese ejército varias veces.(Cuantitativa y cualitativame); eso no ha ocurrido con Ucrania, que sin la intervención de occidente no habría podido pasar del primer año de guerra (les provee de hombres, armas, inteligencia y toda clase de suministros). Lo que hoy vivimos se parece mucho a la víspera de la 1ra guerra mundial, conflicto motivado por la repartición del mundo y sus riquezas entre un grupo de potencias emergentes y otras ya establecidas . Pues hoy tenemos a occidente encabezado por EEUU, y a naciones que cada vez toman mayor protagonismo en la geopolítica mundial (Rusia, China); poniendo estás últimas en riesgo el sistema de reglas en los cuales basan los primeros su dominio y control del mundo. Nuestro planeta no es infinito ni expandible, para que un país tenga más acceso a un mercado, otros tienen que perder su presencia en el mismo y eso no es una opción que los países dominantes acepten tranquilamente. Por otra parte el desafío económico a las potencias establecidas viene aparejado con el reto al sistema de dominación política imperante.
Este artículo de jorge gómez barata es superficial, las estadísticas no son fiables, le aconsejo que en telegram hay varios canales con información actualizada y confiable como Los Sombreros Blancos, Rakot, Irina, etc, por favor pongan artículos serios.
Barata es está explicación
Nada ni nadie podrá contra el ejército Ruso,la OTAN y los Estados Unidos dé Norteamérica, jamás podrán derrotar al pueblo Ruso.
Creo que es un análisis superficial del conflicto. Es una lástima que ONCUBA publique análisis tan ingwnuos. Al autor le pido que estudie un poco más de historia contemporánea y sobre todo de las causas por las cuales Rusia tomó la decisión de empezar la Operación especial.