Este martes por la noche los líderes de la Alanza Atlántica cenaron en Madrid con más tranquilidad. Entre copas de jerez y agobiados por el ataque ruso a Ucrania, que alcanzó dimensiones dantescas el fin de semana con el ataque con misiles al centro comercial de la ciudad de Kremenchuk, los jefes de estado y de gobierno de la OTAN se enteraron de que Finlandia y Suecia ingresarán en las próximas semanas a la alianza militar.
Esto fue posible después de que Turquía se comprometiera a levantar su veto al ingreso, con el cual había amenazado debido al asilo político que ambos países nórdicos han concedido a activistas del grupo separatista kurdo PKK, que Ankara considera terrorista. Los ingresos a la OTAN deben ser aprobados por la totalidad de los estados miembros.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan se comprometió a levantar el veto durante un encuentro con el presidente finlandés Sauli Niinistö, la primera ministra sueca Magdalena Andersson y el secretario general de la OTAN Jens Stoltenberg, así como con los ministros de Asuntos Exteriores de los tres países.
“Nuestros ministros de Asuntos Exteriores han firmado un memorando trilateral que confirma que esta semana Turquía apoyará las solicitudes de Finlandia y Suecia para ser miembros de la OTAN. Los pasos concretos de esta adhesión serán acordados por los aliados de la OTAN durante los próximos dos días”, indica un comunicado distribuido por la presidencia finlandesa.
En esta reunión Ankara “obtuvo lo que quería” al levantar el veto a la entrada de los dos países, a los que acusó de tolerar a los kurdos del PKK, informó la oficina del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
“Turquía ha logrado avances significativos en la lucha contra las organizaciones terroristas”, y ahora “obtuvo lo que quería”, agregó la nota.
Por su lado, el secretario general de la alianza militar, Jens Stoltenberg, dijo que “la OTAN es una alianza exitosa y se fortalecerá con estos dos candidatos”, que “están comprometidos con la defensa de Turquía”.
“Mañana se hará la invitación para unirse, pero hay un acuerdo general de que serán aceptados”, agregó Stoltenberg.
Moscú ha dicho en las últimas semanas de que rechaza la ampliación de la OTAN y acusó a la Alianza Atlántica de arreciar el cerco militar a la Federación Rusa.