El ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, aseveró ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) que para finales de este diciembre los apagones, que con severidad viene padecido la Isla, disminuirán a un promedio menor a las “tres horas” diarias, pronóstico que no excluye días libre de cortes eléctricos.
“Actualmente solo está afectado el servicio en el horario pico de la noche, que inicia a las cinco de la tarde y se extiende aproximadamente durante dos horas”, añadió de la O Levy durante su comparecencia en el Décimo Periodo Ordinario de Sesiones del Parlamento.
Confirma mejoras en el sistema electroenergético nacional el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, en sesión de la @AsambleaCuba
Según estimaciones,a finales de diciembre puede haber días sin afectaciones en las 24 horas pic.twitter.com/t5ek9B6Hze— Alberto López Díaz (@AlbertoLopezcu) December 12, 2022
El funcionario resaltó el descenso progresivo de las afectaciones en las últimas semanas, luego de su peor momento con el paso del huracán Ian, en septiembre. El ciclón dejó el país prácticamente sin electricidad durante casi una semana, situación que otra vez desencadenó protestas, sobre todo en la capital.
En resumen, según datos que publica el diario oficial Granma, 1 364 664 clientes fueron afectados por esa causa, “lo que hizo necesario destinar 4860 trabajadores eléctricos a la recuperación durante más de un mes”.
Según De la O Levy, en la primera quincena de octubre se alcanzó el punto más crítico de la actual crisis energética, con un pico de afectación que superó las 10 horas de apagón. La disponibilidad de generación descendió entonces a un 37.9 % de la capacidad instalada. Sin embargo, en el mes de noviembre fueron capaces de cubrir la demanda durante 23 días, situación lograda en diciembre, a excepción del día primero.
Esto ha sido posible, explicó el ministro, gracias a que la Isla ha podido importar distintos materiales para reparar averías y dar mantenimiento a sus centrales termoeléctricas, que generan casi la mitad de la energía necesaria.
CAUSAS DE LA CRISIS
La situación del sistema eléctrico se fue deteriorando desde 2021 debido en gran medida, y según las palabras del ministro, a las sanciones de EEUU, que incrementaron las dificultades para acceder a los mercados internacionales. También influyó el alto costo para la importación del combustible y el material necesario para la marcha de las centrales.
De la O Levy significó que cada año se requieren, aproximadamente, 250 millones de dólares para el mantenimiento del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), cifra que no incluye el costo de combustibles ni las inversiones para esta industria.
Junto a esto, “el impacto de la COVID-19 condicionó que la mayoría de los recursos financieros del país fueran destinados al desarrollo de vacunas para controlar la peligrosa pandemia, que resultó en una de las grandes victorias de la ciencia cubana”.
Según sus palabras este año se sumaron tres contingencias: los incendios de dos centrales termoeléctricas en marzo y julio, el de la Base de Supertanqueros en Matanzas, en agosto, y, por último, el huracán de finales de septiembre.
Para minimizar el impacto en la población de los cortes del servicio eléctrico, una de las primeras medidas fue afectar a los sectores de producción en la economía, incluida la industria, los comercios, los servicios y otras actividades no vitales, recordó De la O Levy.
Esto, de acuerdo con el ministro de Economía, Alejandro Gil, quien había hablado en la ANPP en la mañana, también perjudicó de otra forma a la ciudadanía, porque hay menor producción y oferta, lo que atiza la escasez y la inflación.
Efe/OnCuba.