El Ministerio de Comercio Interior (Mincin) desmintió este lunes una noticia sobre supuestos ajustes en la canasta familiar normada en la isla, que se ha venido divulgando en las redes.
La entidad responsable de los llamados “mandados” que se venden a la población a través de la libreta de abastecimiento aseguró en sus perfiles oficiales que la información divulgada es falsa.
“El Ministerio del Comercio Interior informa que es falsa la noticia que circula en las plataformas digitales, sobre el anuncio de nuevas medidas con vistas a corregir distorsiones en la economía cubana, relacionadas con la canasta familiar normada”, apuntó en Facebook.
Aunque el Mincin no hizo mención explícita a la información desmentida, en la imagen que acompaña su publicación pueden leerse los “ajustes” negados por la entidad.
Entre estos se cuentan que no se distribuiría más pollo por la libreta y que el aseo, el aceite y los chícharos se venderían de manera trimestral.
La publicación falsa también afirma que las medidas se tomaban “en correspondencia con la disponibilidad de estos productos en las mipymes” y que buscaban “estimular” que “las personas vayan para el campo a trabajar en un segundo empleo”.
En su desmentido, el Mincin recordó que “la situación de la canasta familiar normada fue explicada recientemente en los medios de comunicación” y exhortó a la población a “mantenerse informada, mediante los canales oficiales del organismo”.
Atrasos, faltantes y “limitaciones financieras” siguen lastrando “los mandados” en Cuba
Hace apenas unos días, las autoridades de este ministerio confirmaron la compleja situación actual de la distribución de los mandados en el país.
Entonces reiteraron la existencia de atrasos y faltantes en la entrega de los productos que se distribuyen de manera racionada, al tiempo que informaron sobre “limitaciones financieras” que tensan aún más la entrega de la canasta familiar.
En particular, Betsy Díaz Velázquez, titular del sector, se refirió a la existencia en puertos cubanos de tres barcos con 52 mil toneladas de arroz, los cuales “no se han podido descargar en los puertos por limitaciones financieras”, para cuyo pago, dijo, “se buscan alternativas”.
Además, explicó que el Gobierno “tuvo que recurrir a inventarios y a donaciones, en aras de atenuar la crítica situación del mes que ahora concluye” y señaló que la entrega del aceite y el café no estaba “prevista” en septiembre, como tampoco lo estuvo en agosto.
Cuba atraviesa una severa crisis económica, acentuada por los efectos de la pandemia, las sanciones estadounidenses y las dificultades e ineficiencias internas. Esta situación se refleja particularmente en la escasez de productos básicos, la elevada inflación y los continuos apagones, al tiempo que atiza el descontento social y la emigración en la isla.