Getting your Trinity Audio player ready...
|
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró este lunes que su país tomará el control de “todas las zonas de la Franja de Gaza” como parte de su estrategia para lograr la “victoria total” sobre Hamás, mientras Israel continúa bombardeando a civiles.
La afirmación, divulgada en un video por la radio del Ejército, se enmarca en una escalada militar que ya ha dejado más de 53 000 muertos en el enclave desde octubre de 2023, de ellos más de 15 000 niños, según cifras oficiales del Ministerio de Sanidad gazatí.
“Tenemos unos combates intensos, enormes, y está habiendo progresos. Vamos a tomar el control de todas las zonas de la Franja, eso es lo que vamos a hacer”, afirmó Netanyahu.
עדכון חשוב ממני אליכם >> pic.twitter.com/8dPElxklZc
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) May 19, 2025
Netanyahu, quien tiene una orden de detención de la Corte Penal Internacional desde noviembre de 2024 por crímenes de guerra en Gaza, confirmó una decisión “clave” en el desarrollo de la ofensiva.
Según dijo, se trata de permitir la entrada de una cantidad “mínima” de ayuda humanitaria, presionado por el temor a perder el apoyo de sus aliados.
“Nuestros mejores amigos del mundo, senadores que apoyan apasionadamente a Israel (…) me dicen esto: ‘Te estamos dando toda la ayuda necesaria para la victoria, armas, apoyo, protección en el Consejo de Seguridad. Pero hay una cosa que no podemos aguantar, no podemos aceptar imágenes de una hambruna, una hambruna masiva’”, aseguró el mandatario israelí, en aparente alusión a funcionarios de EEUU.
La fachada de la ayuda humanitaria
La hambruna a la que ha sometido Israel a toda Gaza es consecuencia directa del bloqueo y el ataque permanente contra la franja palestina, tras los ataques de Hamás a territorio israelí en octubre de 2023.
Aunque esta situación ha sido denunciada sistemáticamente por organismos internacionales, lejos de mejorar ha ido a peor con el paso de los meses y la continuación de la ofensiva israelí.

Aunque la entrada de ayuda se plantea como una concesión táctica, Netanyahu subrayó que su gobierno trabaja en un plan para restringir su distribución a puntos específicos en el sur de Gaza bajo control militar.
“Tomará tiempo, vamos a establecer los primeros puntos en unos días y después añadiremos más”, dijo mientras el Ejército israelí sigue violando el alto el fuego y continúa atacando a diario el enclave palestino.
La propuesta, respaldada por Washington pero rechazada por la ONU, pone en entredicho el acceso humanitario “imparcial” en el territorio asediado y no es más que una estrategia para no perder aliados, no para solucionar la hambruna, de acuerdo con analistas internacionales.
Más palestinos muertos en Gaza
Mientras Netanyahu dice que “permitirá” ayuda humanitaria, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ordenaron este mismo lunes la evacuación total de la ciudad de Jan Yunis y zonas aledañas, con la advertencia de que se ejecutaría “un ataque sin precedentes”.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel lanzarán un ataque sin precedentes para destruir las capacidades de las organizaciones terroristas en esta zona. Deben evacuar inmediatamente hacia el oeste, al área de Mawasi”, indicó en X el portavoz en árabe del Ejército, Avichay Adraee.
La arremetida ya ha dejado más de un centenar de muertos en las últimas 24 horas, entre ellos familias enteras, incluidos menores, reportó la agencia EFE.

Una familia de 20 personas, con cinco niños, fue arrasada en Yabalia, al norte del enclave. Con el pretexto de destruir supuestas organizaciones terroristas, Israel sigue asesinando civiles, denuncian reportes de prensa y organizaciones internacionales.
El número total de víctimas desde el inicio de la ofensiva superaba este lunes los 53 400 muertos y los 121 400 heridos, muchos con lesiones irreversibles, según autoridades sanitarias palestinas.
Los ataques siguieron en la noche de ayer y la madrugada de este martes, cuando al menos otro medio centenar de palestinos murió como consecuencia de las bombas israelíes.
Entre los sitios atacados se incluye una escuela en la ciudad de Gaza que servía de refugio para palestinos desplazados y en donde murieron al menos 13 personas.
Ocupación, exterminio y críticas cruzadas con Occidente
Más allá de las operaciones inmediatas, los recientes anuncios del Gobierno israelí revelan un giro estratégico hacia una ocupación prolongada de Gaza que refuerza la política de exterminio de su población.
En una conferencia en Jerusalén a inicios de mayo, el ministro de Finanzas, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, expresó sin ninguna vergüenza: “Estamos conquistando Gaza para quedarnos”, una afirmación que choca con los principios del derecho internacional humanitario.
Smotrich incluso dejó abierta la puerta a una anexión: “Una vez que conquistemos y nos quedemos, podremos hablar de soberanía”.
Toda la población de la Franja de Gaza sigue enfrentándose a un riesgo crítico de hambruna tras 19 meses de conflicto, desplazamientos masivos y severas restricciones a la ayuda humanitaria. Foto: EFE/EPA/HAITHAM IMAD.
Esta postura, respaldada por el gabinete de seguridad con la aprobación de la operación terrestre “Carros de Gedeón”, implica el abandono del enfoque de incursiones puntuales para avanzar hacia una ocupación sostenida.
El propio Netanyahu lo confirmó: Israel está “pasando del método de incursiones al de ocupar territorios y permanecer en ellos”, según citó el diario Israel Hayom.
Esta nueva fase, sumada al desplazamiento forzado de cientos de miles de civiles hacia el sur, ha intensificado las denuncias internacionales por crímenes de guerra, violaciones del derecho humanitario y limpieza étnica, mientras Gaza vive una catástrofe humanitaria sin precedentes.
En este contexto, y ante la permisibilidad de Estados Unidos, otros aliados de Tel Aviv como Europa y Canadá han vuelto a levantar la voz con críticas hacia la actual ofensiva israelí.
Este lunes, Francia, Canadá y el Reino Unido elevaron el tono contra Israel y amenazaron con tomar “medidas concretas” si persiste el ataque indiscriminado en Gaza.
“No nos quedaremos de brazos cruzados mientras el Gobierno de [Benjamín] Netanyahu continúa con estas acciones escandalosas. Si Israel no pone fin a la nueva ofensiva militar y no levanta las restricciones a la ayuda humanitaria, tomaremos otras medidas concretas en respuesta”, señalaron las autoridades de estas naciones, refiere el diario El País.
Incluso, el canciller francés Jean-Nöel Barrot calificó de “insuficiente” la decisión israelí de permitir una “mínima” entrada de ayuda humanitaria a Gaza y abogó por una revisión del acuerdo de asociación con de la Unión Europea con Tel Aviv para “ver si Israel respeta sus compromisos respecto a los derechos humanos”.
En respuesta, el primer ministro israelí acusó este martes a Francia, Reino Unido y Canadá de “premiar” a Hamás por su ataque de octubre de 2023 y los instó a asumir la visión de Donald Trump sobre el conflicto.
“Al pedirle a Israel que ponga fin a una guerra defensiva por nuestra supervivencia antes de que los terroristas de Hamás en nuestra frontera sean destruidos y al reclamar un Estado palestino, los líderes en Londres, Ottawa y París ofrecen un precio inmenso por el ataque genocida contra Israel del 7 de octubre a la vez que abren la puerta a más atrocidades similares”, apuntó en un comunicado.
En su mensaje, Netanyahu insistió en las condiciones que reclama para detener los ataques, entre ellas la liberación de los rehenes y la rendición de Hamás, y aseguró que Israel se seguiría “defendiendo con medios justos hasta conseguir la victoria total”.