El gobernador de Virginia, Terry McAuliffe, está en Cuba desde este 3 de enero y se quedará hasta el día 6, a la cabeza de una misión de marketing y colaboración que su oficina de prensa ya ha calificado de “histórica”.
McAulliffe es el cuarto gobernador de un estado norteamericano que visita Cuba después del 17D, en una suerte de carrera que algunos de sus homólogos han emprendido para asegurar lazos comerciales con la Isla antes que los demás, anticipando un futuro cercano de negocios bilaterales.
En la lista le anteceden Andrew Cuomo, de Nueva York; Asa Hutchinson de Arkansas, y Gregory Abbott, de Texas.
McAuliffe combina su gestión política con las aptitudes del empresario que también es, buscando activamente oportunidades para su estado más allá de las fronteras nacionales, para lo cual ha viajado en misiones anteriores a Medio Oriente, China y la India.
En el caso de Cuba, el atractivo para Virginia está en el potencial de las exportaciones en el sector agrícola, que podrían incrementarse y diversificarse mediante los acuerdos que viene buscando.
“A medida que se sigan normalizando las relaciones entre nuestros países, esta misión ayudará a fortalecer la posición de Virginia, mediante la expansión de las actuales exportaciones agrícolas y el aseguramiento de otras nuevas”, dijo McAuliffe citado en un comunicado de prensa publicado en el sitio web de su oficina.
Durante su estancia en Cuba, el gobernador se reunirá con altos ejecutivos y representantes del gobierno, para cubrir una agenda centrada principalmente en las exportaciones, y en explorar posibles colaboraciones en el área de la transportación marítima, la educación superior y las bellas artes.
El viaje ha sido planeado de conjunto con las autoridades cubanas. En enero de 2015, cuando el actual embajador cubano en Estados Unidos, José Ramón Cabañas, todavía ocupaba el cargo de Jefe de Misión antes de la apertura de la Embajada de Cuba en Washington, fue invitado a ser uno de los conferencistas magistrales en la Conferencia de Comercio Agrícola organizada por la oficina del gobernador McAliffe.
Según el comunicado de su oficina de prensa, ese viaje de Cabañas a Virginia fue el primero que realizó fuera del antiguo perímetro de movilidad limitada a Washington, D.C.
La visita a Cuba también incluye una cena de negocios con empresarios de Virginia y funcionarios cubanos en la residencia del Embajador de Estados Unidos en Cuba, Jeffrey DeLaurentis.
McAliffe ha abogado por la eliminación del embargo de Estados Unidos contra Cuba, que actualmente es uno de los principales obstáculos en los planes que tiene para su estado:
“Quitar estas restricciones antediluvianas que existen sobre el comercio y los viajes creará nuevos empleos y oportunidades económicas para las empresas de Virginia, desde las que operan en áreas rurales hasta nuestros puertos de talla mundial.
“También significará nuevas oportunidades de importar productos cubanos a Estados Unidos. Si podemos hacer negocios con otros países del mundo, deberíamos poder comerciar libremente con un país que es nuestro vecino de al lado.”
En declaraciones previas al viaje, el Secretario de Agricultura y Forestales de Virginia, Todd Haymore, dijo que en la última década la agroindustria local había producido $400 millones de dólares por concepto de exportaciones a Cuba, con unos $25 millones solo en 2015.
La delegación que lo acompaña incluye a la Primera Dama del estado, su esposa Dorothy McAuliffe, y funcionarios de la agricultura, la salud, tecnología, entre otros.