Los patrones de muertes por coronavirus en Estados Unidos cambiaron durante el verano: hubo un aumento en el porcentaje de fallecimientos de hispanos y de personas que viven en el sur y el oeste del país, de acuerdo con un nuevo informe gubernamental publicado hoy viernes.
En el reporte, difundido por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), se analizaron las muertes asociadas al coronavirus entre el 1 de mayo y el 31 de agosto. El informe actualiza uno previo enfocado en los fallecimientos durante la ola inicial de la pandemia, a principios de año, que afectó principalmente al noreste.
De acuerdo con el documento, más de tres quintas partes de las muertes de agosto estaban ocurriendo en estados del sur, y más de una quinta parte en estados del oeste.
Las muertes de hispanos representaron 24% del total de fallecimientos en agosto.
También mostró una baja en las muertes en asilos, de 30% en mayo a 17% en agosto, respecto del total de fallecimientos.
Las personas blancas representaron 51% de las muertes a finales de la primavera y durante el verano, en comparación con el 40% de principios de la primavera.
La proporción de muertes entre personas de la raza negra bajó de 25% a principios de la primavera a 19% en el verano.