El Reino Unido acaba de anunciar hoy domingo que alcanzó su objetivo de administrar al menos una inyección para la COVID-19 a las personas más vulnerables, lo cual aumenta la presión sobre las autoridades para decidir cuándo desmontar las restricciones impuestas a la población a principios de enero.
Más de 15 millones de personas, o el 22% de la población británica, han recibido su primera vacuna contra la enfermedad. La cifra incluye a todos los mayores de 75 años, los trabajadores de atención médica de primera línea y el personal y los residentes de hogares de ancianos. Más de 537.000 de ellos también recibieron su segunda dosis.
“¡15.000.000! Un equipo increíble”, dijo Nadhim Zahawi, el ministro de vacunas, en un tuitt que mostraba un corazón rojo y tres jeringas. Agregó que no descasarán hasta ofrecer la vacuna “a los más vulnerables y mayores de 50 años para fines de abril y, luego, a todos los adultos”.
El 22 de febrero el primer ministro Boris Johnson dará a conocer su plan para aliviar las restricciones ante un marcado descenso en las cifras de contagios, hospitalizaciones y muertes desde que el 4 de enero comenzó el tercer confinamiento nacional.
“Este país ha logrado una hazaña extraordinaria: administrar un total de 15 millones de inyecciones a algunas de las personas más vulnerables del país”, dijo Johnson en un tuitt.
El cierre de escuelas, restaurantes y tiendas no esenciales en el Reino Unido está comenzando a dar sus frutos. El número de nuevas infecciones, ingresos hospitalarios y muertes registradas durante los últimos siete días se ha reducido en más de un 20% respecto a la semana anterior.
Cuando Johnson anunció el cierre, dijo que el gobierno revisaría las medidas a mediados de febrero. La prioridad es reabrir las escuelas a comienzos de marzo.
Gran Bretaña ha informado más de 117.000 muertes por coronavirus, el mayor número de víctimas de la pandemia en Europa.