El senador cubanoamericano Marco Rubio ha rechazado la próxima visita a Estados Unidos de una delegación de los Guardafronteras cubanos, una práctica común en su tiempo, pero que entró en desuso.
La administración Biden ha decidido reanudar los contactos en el marco de las últimas reuniones bilaterales teniendo en cuenta el incremento de balseros en el Estrecho de Florida. El año pasado hubo una reunión similar, pero en La Habana.
Rubio cree que los encuentros de esta semana, que serán en la sede nacional de los Guardacostas en Washington DC y en el puerto militar de Wilmington, Carolina del Norte, no deben realizarse porque los Guardafronteras pertenecen al Ministerio del Interior.
En una carta enviada a Biden, Rubio argumenta: “los Guardafronteras del régimen no solo están subordinados al Ministerio del Interior de Cuba, que figura en la lista de Entidades Restringidas y Subentidades Asociadas con Cuba, sino que también es muy probable que la delegación incluya miembros de las agencias de inteligencia de Cuba. Esto es censurable y envía un mensaje terrible a los estadounidenses y al mundo. Exijo que usted cancele de inmediato esta visita y brinde una explicación clara de por qué está compartiendo los protocolos de seguridad de nuestra nación con uno de los adversarios extranjeros más antiguos de nuestro país”.
Guardafronteras de Cuba y Guardacostas de EEUU realizan encuentro técnico en La Habana
En su opinión, “nuestras defensas oceánicas y dominio marítimo son el mayor activo de seguridad nacional de nuestra nación, que separa a Estados Unidos de la mayoría de nuestros adversarios por miles de millas. Sin embargo, en el caso de Cuba los estadounidenses viven a solo 90 millas de las costas de esta vil dictadura comunista aliada con potencias extranjeras que buscan socavar a nuestro país. Para los floridanos, la Guardia Costera de Estados Unidos es la primera línea de defensa contra las amenazas a nuestro sur”.
“Extender una invitación a agentes de inteligencia cubanos a instalaciones sensibles de seguridad nacional y compartir con ellos los protocolos de seguridad costera y marítima de nuestra nación es un incumplimiento atroz del deber y traiciona uno de los principios fundamentales del juramento que [Biden] ha hecho: proteger a Estados Unidos de enemigos extranjeros. Debe cancelar esta visita de inmediato y explicarle al pueblo estadounidense cómo se permitió que esto sucediera bajo su mandato”, enfatizó.
Este lunes la Casa Blanca no quiso revelar qué día comienza la visita y cuánto dura. Rubio dijo que el Congreso fue notificado por el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Estado. Un portavoz dijo la semana pasada al Miami Herald : “no tenemos nada que confirmar en este momento”.
La cooperación entre los Guardacostas estadounidenses y cubanos ha sido históricamente una de las más aceitadas formas de comunicación. A principios de la década de los 80, tras la crisis del Mariel, los estadounidenses abrieron un despacho en la entonces Oficina de Intereses con un delegado y establecieron una línea directa telefónica entre ambas instituciones.
Esto permitió resolver decenas de casos de recuperación de naves en peligro, la persecución común al narcotráfico y el rescate de náufragos a la deriva en el Estrecho. En los últimos dos años los guardacostas han estado muy activos en la devolución de balseros.
Por otro lado, este fin de semana arribaron al Parque Nacional de Dry Tortugas, al oeste de Cayo Hueso, 22 balseros.
El parque se encuentra cerrado después de que a inicios del mes de enero llegaron unos 300 balseros. Fueron llevados a Cayo Hueso y Miami antes de ser devueltos a la isla.