Michel Hernández
Una nueva plataforma en línea ha unido a los trovadores cubanos y a otros exponentes de la escena de la música contemporánea con un público internacional. Se trata de My Cuban Radio (www.mycubanradio.com) , creada por el promotor estadounidense Roberto Corona, que transmite quincenalmente conciertos de músicos cubanos en sus redes sociales. Las presentaciones han llegado a espectadores de más de 100 países en el breve lapso que lleva en pie esta iniciativa representada en Cuba por el cantautor Mauricio Figuerial.
Músicos como Jorgito Kamankola, Oscar Sánchez, Inti Santana, Celestino y el propio Mauricio ya han ofrecido conciertos con un alto rating de audiencia en Internet. La plataforma ha confirmado el interés de un amplio número de personas en la escena musical cubana, especialmente en la zona de la canción de autor, la cual no encuentra aún en la Isla una difusión coherente y sostenida en los medios de comunicación y en otros tejidos institucionales.
Roberto Corona comenzó a darle cuerpo a este proyecto durante una visita a La Habana donde se reunió con varios trovadores, periodistas y artistas de diferentes ámbitos de la creación.
OnCuba, que ha presenciado varios de estos conciertos online, conversó con el fundador de My Cuban Radio, un espacio que según Corona tiene entre sus propósitos iniciáticos trazar vínculos más estrechos de la música cubana con la estadounidense y la latinoamericana.
¿Cuál es el origen de My Cuban Radio?
“En una conversación acompañada de ron y tabaco, Mauricio Figueiral y yo nos conocimos en el Cubadisco dedicado a la trova hace algunos años, y desde entonces seguimos en contacto y compartiendo ideas para promover la música cubana contemporánea. Yo solo conocía a los artistas y cantautores más famosos de Cuba y a Buena Vista Social Club. Siempre he admirado a Cuba por su música y la influencia que ha tenido en Latinoamérica y el mundo. Después de pasarme un par de semanas con Mauricio visitando espacios para la promoción de la canción de autor, me seguí empapando de una Cuba musical que no conoce mucha gente fuera de la Isla. Cuando llegó a casa en San Diego, California, no podía pegar mis ojos pensando en cómo compartir eso que vivimos un par de amigos que me acompañaron y yo.
Ya estábamos pensando en producir una serie de entrevistas con Mauricio Figueiral, sin embargo, la distancia y mis compromisos sociales y familiares postergaron esa iniciativa de mi parte. A final fue lo mejor, porque Mauricio montó la serie de Sesiones Vagabundas con su equipo) espacio que se transmite por la televisión cubana) y, como buen cubano, no necesitó mucho de mi ayuda. Es un gran realizador y hace un trabajo excepcional.
Recuerdo cuando llegué a casa después de aquel viaje a La Habana. No podía dormir y al día siguiente, antes de atardecer, puse una radio online y comencé a compartir mi radio cubana con mis amistades y familiares. No sabía si otra gente la disfrutaría igual que yo, pero decidí pasar la voz por todos lados. Cuando le comenté a Mauricio, coincidimos en que sería un buen canal al mundo para compartir la música, sus músicos y cantautores y la cultura cubana contemporánea en general. Muchos de mis amigos solo conocen dos polos extremos de Cuba y su gente. Pienso que la radio pueda ayudar a ver la diversidad y belleza de los cubanos dentro y fuera de la Isla.
¿Has pensado en algún horizonte específico al cual podría llegar la plataforma?
El objetivo es precisamente compartir con el mundo esa diversidad y la realidad de la Cuba contemporánea a través de la música y otras expresiones culturales y artísticas. Ojalá podamos llegar a ser un espacio de referencia de la música y cultura cubana contemporáneas. Un aspecto fundamental y catalizador de este proyecto es el deseo de que el mundo conozca a artistas que no han tenido la oportunidad de exponer su talento fuera de la Isla.
¿Cómo ha sido tu experiencia con la música cubana en Estados Unidos?
Creo que no hay música contemporánea que no tenga algo de sabor cubano. En Estados Unidos, antes del Buenavista Social Club, la música cubana siempre se ha dejado asomar en las producciones de muchos artistas. Nunca faltan por allí algunas congas, maracas o güiro que evoquen los ritmos cubanos. Desde Santana, las Bing Bands de los años 40 a Frank Sinatra.
Actualmente están destacando fenómenos como Cimafunk, que fusiona de una manera casi orgánica, el funk con la música cubana, lo cual ha tenido mucho éxito y sigue traspasando fronteras aun en medio de una pandemia universal. Lo que más me ha gustado, conforme sigo descubriendo a más y más artistas, es que en lo contemporáneo y en todas las fusiones que van surgiendo en Cuba, sus raíces siguen vivas y transformando cuanto género se le cruza en el camino. Es precisamente eso lo que me gustaría compartir con el mundo.
¿Qué dificultades has enfrentado para encauzar este proyecto?
Sigue siendo la relación entre Cuba y Estados Unidos un obstáculo para realizar algunas actividades que pudieran beneficiar el intercambio cultural entre ambos países y a los músicos y cantautores cubanos. Y pues por la plata no nos preocupamos, porque simplemente no hay. Nos enfocamos en que los artistas tengan un modesto espacio para expresarse y compartir con el mundo su pensar y su sentir. Lo más importante y valioso que tenemos es nuestro tiempo, nuestra creatividad y un montón de amigos que creen que nuestro proyecto.
¿Cómo ha sido hasta el momento la recepción de los conciertos?
Los han escuchado en más de 150 países y sigue creciendo el número de personas que la oyen. Primordialmente, su éxito se lo debemos a los cantautores, músicos y artistas cubanos que han colaborado con su hermoso trabajo y sus fans que han encontrado en My Cuban Radio un espacio para escucharlos.
Después, a familiares y amistades que ven en este proyecto una propuesta creativa y honesta que solo pretende compartir con el mundo la palabra hecha canto de los cantautores cubanos y el latir de la música y la cultura cubana contemporánea, para que el mundo sea testigo de la diversidad de la Cuba de hoy. Somos solo una ventanita que cada vez revela más y más la magia de una Isla que sigue pariendo grandes artistas.
