Redacción OnCuba
En lo que va de febrero la provincia de Camagüey ha registrado 492 casos positivos de la COVID-19, treinta más que en enero. Esto dice de la situación epidemiológica prevaleciente en ese territorio, que presenta una tendencia al incremento de contagiados.
Los municipios de Najasa y Jimaguayú son hasta ahora los únicos sin focos abiertos. Los generados a partir de viajeros internacionales infectados no exceden el 5% del total. Hasta ayer lunes, más de 210 focos permanecían activos.
El doctor Juan Llambias Peláez, director del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, dijo que desde hace varios días a los contactos directos de casos confirmados se les aísla en centros habilitados al efecto, pero que en cierta medida esa cifra ha desbordado las capacidades previstas.
Varios lugares del territorio agramontino, incluyendo varias instalaciones de Campismo Popular, están puestas en función del control epidemiológico. Cono promedio, se aíslan alrededor de 13 contactos por cada enfermo identificado. Cuando son más, dijo el galeno, ello generalmente ocurre por violaciones del comportamiento y de las normas vigentes.
A partir de es situación epidemiológica concreta, el Consejo de Defensa Municipal de Camagüey valora aplicar la vigilancia reforzada, con restricción de la movilidad en manzanas pertenecientes a las áreas de salud Previsora y Oeste, subrayó Llambia Peláez.
En muchas de esas zonas, después de efectuarse las investigaciones del caso las causas fundamentales son fiestas y otras celebraciones relacionadas con el 14 de febrero, así como violaciones en el uso del nasobuco en lugares públicos, sobre todo en la periferia de la ciudad, dijo el especialista.
Hasta ayer lunes más de 380 pacientes de Camagüey, Ciego de Ávila y de otras provincias cubanas recibían atención en los hospitales Clínico Quirúrgico Amalia Simoni, Militar Octavio de la Concepción y el Pediátrico Eduardo Agramonte Piña, y la Villa Azucarera, habilitada para el tratamiento de infectados sin síntomas.
En Camagüey 954 personas enfermaron con la COVID-19 desde el comienzo del actual año: 816 son casos autóctonos y 138 importados, incluyendo dos colaboradores que regresaron a Cuba.
