Un segundo grupo de colaboradores de la salud de Cuba, pertenecientes al Contingente Henry Reeve, partió ayer hacia México para contribuir al enfrentamiento a la COVID-19 en la capital.
El grupo de 500 profesionales cubanos continuarán la labor de los más de 800 que ya prestaron atención médica en varias ciudades de ese país.
Durante este año, brigadas cubanas prestaron servicios en Ciudad de México, Quintana Roo, Veracruz y Tabasco: realizaron más de ocho mil procederes y salvaron 324 vidas durante tres meses.
Hasta la fecha, 54 grupos de este contingente han prestado servicios en 39 naciones, en total más de 4.000 trabajadores del Sistema Nacional de Salud.