Cuba llega al fin de semana con alto déficit de electricidad

Este viernes se pronostica una afectación de 783 megawatts en el horario pico.

Una persona camina por una calle sin luz eléctrica el 17 de mayo de 2024 en La Habana. Foto:. EFE/Ernesto Mastrascusa.

Cuba llega al fin de semana con elevado déficit de generación, que estimaba una afectación al mediodía de este viernes en el orden de los 350 megawatts.

“Se estima para la hora pico una disponibilidad de 2 387 MW y una demanda máxima de 3 100 MW, para un déficit de 713 MW, por lo que de mantenerse las condiciones previstas se pronostica una afectación de 783 MW en este horario”, señaló hoy la Unión Eléctrica.

De acuerdo con el reporte, la disponibilidad del Sistema Electroenérgético Nacional a las 07:00 de la mañana fue de 2 387 megawatts, mientras que la demanda se ubicó en 2294 megawatts.

Como detalla la nota, la máxima afectación del jueves fue 621 MW a las 21:50 horas.

Actualmente, agrega el comunicado de la Unión Eléctrica, se encuentran fuera por avería la unidad 4 de la termoeléctrica de Cienfuegos, la unidad 2 de Felton, la unidad 5 de la Renté, la unidad 5 de la termoeléctrica de Nuevitas y la unidad 2 de la termoeléctrica de Santa Cruz.

Asimismo, se encuentran fuera de servicio por combustible 49 centrales de generación distribuida, para un total de 290 MW afectados por este concepto.

Las principales causas de las interrupciones del servicio eléctrico siguen siendo la falta de combustible, las averías y los mantenimientos en varias de las centrales eléctricas terrestres.

El sistema eléctrico presenta un estado precario por las averías en sus centrales termoeléctricas, obsoletas por sus más de cuatro décadas de uso, la falta de inversiones y mantenimientos, así como de combustible importado.

En los últimos años, Cuba ha rentado hasta siete centrales eléctricas flotantes (de las que actualmente solo quedan cinco. Con ellas ha logrado aliviar la falta de capacidad de generación, una solución rápida pero temporal, contaminante y costosa.

Los frecuentes apagones dañan a la economía, que en 2023 se contrajo entre 1 y  2 %. Además, atizan el descontento social en una sociedad gravemente afectada por una profunda crisis económica.

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