La travesía de un cubano de 56 años, que partió caminando desde La Habana hacia el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en la oriental provincia de Santiago de Cuba, se ha hecho viral en las redes sociales y fue reflejado por medios oficiales de la Isla.
El semanario Escambray, de la provincia de Sancti Spíritus, publicó un reportaje sobre el paso de Omar Quintero Montes de Oca por ese territorio del centro cubano, donde ha recibido numerosas muestras de solidaridad y apoyo a su peregrinaje, una promesa hecha por la salud de su hijo.
Quintero Montes de Oca contó a ese medio que partió de su casa, en el capitalino municipio de Marianao, a las 5:50 de la mañana del pasado 15 de enero, con la bendición de su madre y los abrazos de dos hermanos y un vecino. Desde entonces, se traslada caminando por el borde de la Carretera Central con carrito blanco con cuatro ruedas y techo rojo, donde protege a la imagen hecha de calamina de la Patrona de Cuba que le acompaña desde hace más de 20 años.
“Mi promesa de ir caminando desde La Habana hasta El Cobre, en Santiago de Cuba es por la salud de mi hijito… Si ella me lo salvaba yo iba y aquí estoy. Sobrevivir a un tumor en el mediastino, luego que lo operaron, no le pudieron hacer nada y hoy el tumor está en el mismo lugar, sin hacer metástasis, creo que es poco común”, confesó a Escambray.
El medio espirituano refiere que el hijo de Omar, Lázaro Quinterño Bermúdez, de 36 años, fue diagnosticado hace 10 años. Según su padre, “apenas puede caminar porque se cansa mucho” y duerme sentado, al tiempo que continúa su tratamiento con radiaciones, aunque no ha recibido quimioterapia.
Sobre el apoyo recibido a lo largo de su travesía, Omar dijo que ha sido mucho desde que pasó por San José de las Lajas, y que ha cumplido con el plan de no dormir en ninguna casa particular. Hasta el momento lo ha hecho en sus alrededores, y se baña solo en los ríos porque “tanto mi Virgencita como Yemayá, son de agua”, asegura.
De acuerdo con Escambray, Quintero Montes de Oca tardó más de 12 horas en cubrir el tramo entre el poblado de Guayos y la cabecera provincial espirituana debido, en parte, al “mar de gente” que se agrupó a lo largo de la carretera para mostrarle su solidaridad, regalarle comida, dinero, ofrendas, o simplemente para tomarse una foto con él.
“He tenido que apagar el celular para avanzar, porque ya hasta de Santiago de Cuba me dijeron que me esperan. Hubo un niñito de dos años, de Colón, Matanzas, que me sacó las lágrimas. Soy un cubano humilde, trabajador desde hace 14 años en un centro de elaboración de alimentos, amante de este país. Hasta traigo una carta de mi jefe que da constancia de que saben y apoyan esta decisión”, explicó.
Según el reportaje, Omar no tiene idea de qué día estará de frente a la escalinata de la Basílica Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, pero se aferra a sus creencias para continuar viaje, cuando aun no ha completado la mitad del trayecto.
“Voy a llegar. No sé si de rodillas, con las manos, pero lo haré por mi hijo y por todos los enfermos de cáncer del mundo. Hay que vivirlo para saber la crueldad de una enfermedad que puede afectar a cualquier persona”, dice.
De acuerdo con su declaraciones, luego de cumplir su promesa aspira regresar a su casa en Marianao mediante algún medio de transporte y con su carrito. Además, dice que de todo lo recibido a lo largo del trayecto, compartirá lo que no utilice con las personas que lo necesiten y que con el sobrante del dinero que le han regalado comprará juguetes para donarlos a los niños con cáncer.
Omar, échale ganas. Eres una buena persona y mereces todo nuestro apoyo y solidaridad.Ojala tu hijo mejore pronto su salud. No te desanimes. Un abrazo grande desde México.