El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, calificó este sábado de “acto de extraterritorialidad” y “soberbia imperial” las nuevas sanciones de EE.UU. contra los envíos de petróleo venezolano a la isla, consideradas una escalada en la presión de ese país hacia el mandatario Nicolás Maduro.
“Estados Unidos sancionó este viernes a embarcaciones y compañías que participan en el transporte de combustible entre Cuba y Venezuela, una actividad legal y amparada por acuerdos comerciales. Estas medidas son un acto de extraterritorialidad, injerencia y de soberbia imperial”, escribió Díaz-Canel en su cuenta de Twitter.
https://twitter.com/DiazCanelB/status/1114488886602928128
El mandatario respondió así a las medidas del Departamento del Tesoro de EE.UU. contra 34 cargueros de la petrolera estatal venezolana PDVSA y las empresas Ballito Shipping Incorporated, con sede en Liberia, y ProPer In Management Incorporated, con base en Grecia, dedicadas al transporte de crudo venezolano a Cuba.
Las sanciones incluyen la congelación de los activos financieros que puedan tener bajo jurisdicción estadounidense y prohíben las transacciones financieras con las compañías implicadas.
“Cuba ha sido una fuerza de fondo alimentando el descenso de Venezuela hacia la crisis. El Tesoro está tomando acciones contra barcos y entidades que transportan petróleo y ofrecen una ayuda vital para mantener el régimen ilegítimo de Maduro”, indicó ayer viernes el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en un comunicado.
Para Cuba, que tiene en Venezuela a su más estrecho aliado económico y político en la región, el “ataque contra PDVSA y sus buques es un acto de piratería”, aseguró el ministro de Exteriores cubano Bruno Rodríguez.
“Ante fracaso de intentos de ‘cambio de régimen’ en Venezuela, Washington acude a mentiras desvergonzadas para justificar su conducta crecientemente agresiva. (…) Las calumnias contra Cuba son una infamia”, insistió el canciller también vía Twitter.
Rodríguez denunció la “escalada de agresiones” de Estados Unidos con América Latina, “el uso de mentiras escandalosas contra Cuba”, y los intentos de “dañar a Venezuela y robar sus recursos”.
“Fracasarán”, vaticinó el jefe de la diplomacia del país, que se mantiene entre los principales defensores del Gobierno de Nicolás Maduro, al que considera el único “presidente constitucional” de la nación suramericana frente al líder de la Asamblea venezolana, Juan Guaidó.
Guaidó es reconocido como mandatario interino por más de cincuenta países, pero es calificado por La Habana como “una marioneta de Estados Unidos”.
Cuba y Venezuela son estrechos aliados políticos y económicos desde que en el año 2000 el país suranmericano se convirtió en el principal proveedor de crudo de la isla a través de un convenio que le otorga precios preferenciales a cambio de servicios médicos y educativos.
Sin embargo, la intensa crisis que vive hoy Venezuela ha provocado un descenso en el intercambio comercial bilateral y un sensible descenso en los envíos de petróleo subsidiado que suministra a Cuba, que ha tenido que buscar proveedores alternativos como Rusia y Argelia.
Cuba y EE.UU. viven hoy un renovado estado de tensión en sus relaciones bilaterales, que con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca han tomado un giro negativo tras el periodo dulce de “deshielo” impulsado por los expresidentes Barack Obama y Raúl Castro.