El pasado sábado la salida de la unidad 1 de la termoeléctrica de Felton puso más tensión sobre el venido a menos Sistema Eléctrico Nacional (SEN) de Cuba.
La planta holguinera, una de las más potentes de la isla, se desconectó por un salidero en la caldera. Se trata de una avería cuya solución no es factible hasta que no se acceda a su interior, algo que inicialmente se previó para este miércoles.
Sin embargo, ayer lunes la Unión Eléctrica (UNE) aseguró que ya se había identificado la causa de la rotura y previó que su entrada podría ser entre el propio miércoles o el jueves, aunque ello dependería de las comprobaciones que se realicen sobre la marcha.
Pero allí no terminaron las cuitas del SEN. Este lunes también se desconectaron la unidad 5 de la termoeléctrica de Nuevitas y tres turbinas y el ciclo combinado de Energás Boca de Jaruco, lo que —lógicamente— elevó las afectaciones eléctricas por encima de lo planificado.
Esas plantas se unieron a las que ya se encontraban fuera por roturas o mantenimientos, entre ellas la mencionada Felton 1, donde —según dijo su director técnico, Víctor Hugo González Quiala— se están realizando varias “tareas clave” y se trabaja en una treintena de labores paralelas a la reparación principal.
El domingo, Eric Milanés Quinzán, director general de la termoeléctrica, había explicado a Granma que las reiteradas roturas en ese bloque se debían al “alto nivel de corrosión de dos de sus siete paredes, motivado por la prolongada explotación”.
Entonces dijo que la solución definitiva a ese problema “depende de la disponibilidad de una suma considerable de divisas para adquirir el metal necesario” y llevaría una paralización de unos dos meses “para ejecutar la mejoría requerida”, algo que al menos por ahora no se acometerá.
Apagones del martes
Tras una afectación máxima este lunes de 1795 MW poco antes de las 8:00 PM y otra madrugada de apagones continuos, a las 6:00 de la mañana eran casi 1000 los MW de déficit, una cifra que se incrementará hasta los 1250 MW al mediodía, de acuerdo con el estimado oficial.
A los bloques desconectados se unen 326 MW fuera de servicio por limitaciones térmicas y otros 494 MW afectados por falta de combustible y lubricantes. De estos, solo 50 MW se debe recuperar en el pico nocturno.
También para la noche la UNE prevé la entrada de la turbina 5 de Energás Boca de Jaruco con 30 MW. Del resto de motores de esa planta, la entidad no hace mención si ya se incorporaron o si se mantienen sin generar.
Ante este deficitario panorama, el reporte oficial estima una disponibilidad de solo 1750 MW y una afectación de 1670 MW. No obstante, esa cifra pudiera ser superada si no ocurren las incorporaciones previstas, se produce otra avería o la demanda sobrepasa el pronóstico de la UNE.