Todavía no se habían “enfriado” las noticias dejadas por el presidente ruso Vladimir Putin tras su paso por Cuba cuando llega Xi Jinping, mandatario de la República Popular China, y negocia con el Gobierno de la Isla 29 acuerdos relevantes para la economía nacional.
Los fundamentales fueron en torno a cuatro grandes asuntos: los créditos, las telecomunicaciones, la ciencia y la industria, aunque también se beneficiarán sectores como la educación y la cultura.
Algunos de los convenios más significativos fueron el otorgamiento de una línea de crédito concesional para la construcción de una “terminal multipropósito” en el puerto Guillermón Moncada de Santiago de Cuba, el aplazamiento por 10 años del pago de la deuda cubana libre de interés, la cesión de créditos para comprar equipamiento que desarrolle las telecomunicaciones y para tres plantas de producción de bioplaguicidas y un laboratorio de alta seguridad, así como otro crédito —“gubernamental” y “libre de interés”— para la ejecución de otros proyectos o suministros de materiales y equipos.
De las telecomunicaciones, asunto medular en el contexto cubano, se pactó una enigmática “cooperación en el ciberespacio” con la Oficina Estatal de Ciberseguridad e Información de China, y un memorando entre el Ministerio de Comunicaciones de la República de Cuba y el Ministerio de Industria y Tecnologías de la Información de la República Popular China sobre la cooperación en el sector de las tecnologías de la información.
En el plano industrial, uno de los más atractivos para la inversión extranjera, se acordó el servicio de perforación de petróleo de pozos de hasta 9 mil metros de profundidad y la participación de la Corporación Nacional de Petróleo de China en la recuperación de petróleo crudo en el yacimiento Seboruco; el intercambio y la cooperación industrial en particular en las industrias de maquinarias, metalúrgica, ligera, química y electrónica; así como contratos comerciales para el suministro de sínter de níquel y de sulfuro de níquel, ambos por 5 años.
Para la agricultura, uno de los sectores económicos más golpeados por el Periodo Especial, el bloqueo y la improductividad, se firmó un compromiso para la creación de una granja dirigida a “impulsar el desarrollo ganadero; y la cooperación entre los Centros de ambos países para la ciencia y tecnología de Moringa, de Morera y Gusano de Seda en el Proyecto de Sericultura de Cuba”.
También se le aprobó un protocolo sobre la calidad y seguridad de los tabacos exportados hacia China y un memorando para ampliar la cooperación en asuntos similares en la exportación de azúcar crudo.
En el área científica las naciones profundizaron la cooperación en la investigación, desarrollo e industrialización de la biotecnología, firmaron un memorando sobre el sector de las energías renovables y otro para el de la salud, además de acordar una donación de equipos de monitoreo ambiental entre el Ministerio de Protección Ambiental de China y el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba.
Se convenió, igualmente, la ejecución del proyecto de construcción de líneas de envasado aséptico y de Doy-Pack para la fábrica de frutas y conservas de Ciego de Ávila, el suministro de equipos para el despliegue de la televisión digital, así como el suministro de equipos de medición de agua para las redes de acueducto de las capitales provinciales y la donación de equipos de oficina y de transporte.
Xi Jinping: 48 horas en la Isla
El presidente chino llegó a Cuba el lunes pasado en la noche tras un periplo oficial por Brasil, donde estuvo en la Cumbre de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), y por Argentina y Venezuela. Fue recibido por el Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, Miguel Díaz-Canel.
El martes se reunió con el mandatario cubano Raúl Castro, quien en ceremonia oficial le impuso la Orden Nacional José Martí, máxima condecoración que otorga la República de Cuba. Luego del acto solemne, se firmaron los 29 convenios de cooperación.
Ese mismo día el también Secretario General del Comité Central del Partido Comunista chino sostuvo conversaciones con el expresidente cubano Fidel Castro, con quien reflexionó acerca de “la situación internacional”, los desafíos de la humanidad y la Cumbre del grupo BRICS. Por la noche asistió a una función especial de ballet con representantes de las escuelas nacionales de danza de ambos países.
El miércoles marchó acompañado por Raúl hacia Santiago de Cuba donde, según informa Notimex y varios medios locales, visitaron el cementerio de Santa Ifigenia, donde se encuentran los restos del Apóstol cubano José Martí; la Ciudad Escolar 26 de Julio, antiguo cuartel Moncada; y el antiguo ayuntamiento, actual sede de la Asamblea Municipal del Poder Popular.
En un mensaje de Xi Jinping entregado a la prensa cubana él llama a Cuba “un país de peso” en América Latina y el Caribe, recuerda que en 1960 esta fue la primer nación de la región que estableció relaciones diplomáticas con China, y opina que la actualización del modelo económico cubano puede constituir nuevas e importantes oportunidades de desarrollo para los lazos chino-cubanos.
Una agenda paralela a la del presidente chino mantuvo el grupo de empresarios de su país que lo acompañó. Entre esas actividades estuvo la inauguración de una Planta de Producción de Biosensores que beneficiará a los más de 800 mil pacientes diabéticos de la Isla.
Según la agencia Xinhua, las estadísticas oficiales muestran que el comercio bilateral creció un 7,9 por ciento, o sea, a 1.879 millones de dólares el año pasado y quizás —después de la aprobación de la Ley de Inversión Extranjera, la consolidación de los negocios con Brasil, la reducción en un 90 por ciento de la deuda soviética de Cuba y la decena de convenios firmados con Rusia— los nuevos convenios que la Isla acaba de firmar con China sean una de las buenas noticias que podría traer este verano a la economía cubana.