La muerte de una niña y las afectaciones sufridas por otros dos menores tras ser vacunados en un policlínico de La Habana, se debió a “negligencias durante el proceso de conservación, preparación, manipulación y exposición del bulbo utilizado”, asegura el informe oficial del Ministerio de Salud Pública de la Isla (Minsap).
De acuerdo con las conclusiones de la investigación realizada, dadas a conocer la noche de este viernes, la causa del “evento adverso asociado a la vacunación con PRS”, la cual protege contra la Parotiditis, Rubéola y Sarampión, “no está vinculado a las propiedades intrínsecas y de calidad de la vacuna”, sino a “violaciones de las normas establecidas en la vacunación”, en el Policlínico “Betancourt Neninger“ del municipio Habana del Este, donde los niños habían sido vacunados el pasado 7 de octubre.
Por esta razón, la enfermera “involucrada directamente” en el hecho fue separada definitivamente del Sistema Nacional de Salud, inhabilitada del ejercicio de su profesión y “se encuentra en proceso de instrucción penal”, mientras que “a otros cuadros y funcionarios con responsabilidad en el control de las deficiencias identificadas, se le aplicaron medidas administrativas”, precisa el informe.
Como resultado de las negligencias señaladas, la niña Paloma Domínguez Caballero, de un año de edad, falleció la noche del 9 de octubre “como consecuencia de las complicaciones”. Las otras dos niñas afectadas, “a partir del tratamiento intensivo realizado, se recuperaron y fueron dadas de alta hospitalaria”, asevera el Minsap, que detalla que el cuadro clínico de “otros dos niños con sintomatología”, “no se correspondió con este evento y evolucionaron favorablemente de su enfermedad”.
Todos los menores “inmediatamente después de aparecer los síntomas, fueron ingresados y recibieron atención médica en los servicios intensivos de los hospitales pediátricos “Borrás-Marfán” y Centro Habana”, según el Minsap.
Díaz-Canel envía condolencias en Twitter a padres de niña fallecida
“El cuadro clínico presentado por las tres niñas afectadas con el evento adverso, se corresponde con un Síndrome de Shock Tóxico, provocado por una bacteria (Estafilococo aureus), aislada en las investigaciones realizadas”, explica la comisión investigadora, el cual precisa que “se comprobó” que el lote y diluente utilizado en la vacunación “se encuentra apto para su uso, según los exámenes de laboratorio realizados en varios centros de investigación acreditados del país”.
Esta vacuna, que se aplica en Cuba “según esquema oficial, a los niños de uno y seis años de edad”, es importada y “está precalificada por la Organización Mundial de la Salud, certificada y aprobada para su uso por el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED)”.
Del lote de la vacuna y diluente implicado, afirma el Minsap, se habían administrado este año en la Isla 43.630 dosis, “sin reportes de eventos similares”. Con anterioridad, desde 1986 hasta 2018 se habían aplicado en la Isla más de 9 millones de dosis de la vacuna PRS, “sin la ocurrencia de eventos graves”.
En el informe, las autoridades de salud de Cuba lamentan lo sucedido y aseguran que “los resultados de la investigación fueron informados a familiares de los tres niños afectados” y que adoptan “las medidas para que hechos como este no se repitan en nuestro país”.
La divulgación del informe oficial ocurre pocos días después de la salida hacia México de Yaima Caballero y Osmany Domínguez, padres de la niña fallecida y quienes tras este hecho han urgido a las autoridades cubanas a dar una explicación de lo ocurrido y han asegurado haber sido presionados para abandonar su campaña a través de las redes sociales, lo que ha sido negado por las autoridades de Salud.
Y bien que se la nieguen, están siendo voceros de una mentira, oiga no me imagino el dolor que deben estar pasando, pero una cosa es eso, y otra pretender que su muerte sea culpa del gobierno o del socialismo, eso es una incoherencia total, es una negligencia, y ya alguien está pagando por eso, doloroso, pero no hay que extrapolar, ni irse pa Mexico a llorar, lejos de su niña…
que horror!