El libro Hombre del silencio. Diario de prisión de Ramón Labañino, uno de los cinco agentes cubanos prisioneros en Estados Unidos desde 1998 y hasta 2014, mereció el Gran Premio del Lector 2019, reconocimiento que se entrega en Cuba al texto de mejores ventas en espacio de un año.
El premio se entregó en la sala Nicolás Guillén de la Fortaleza de San Carlos de La Cabaña, en el marco de la 29 Feria Internacional del Libro, que termina este 16 de febrero sus actividades en la sede principal de La Habana, para seguir por el resto de las provincias hasta el próximo 12 de abril.
Según el autor del texto, resumir en 208 páginas sus vivencias durante el encarcelamiento fue un proceso complejo, para relatar lo mejor posible todas las historias a lo largo de 16 años y ofrecer al lector la dimensión del drama que sufrió en ese período de tiempo.
Publicado por la Editorial San Luis, la obra fue resultado “de la complicidad y el desgarramiento […], donde intento adentrar al lector en la piel de un preso político en cárceles norteamericanas; por eso es un libro muy doloroso”, comentó Labañino, quien calificó su obra como un hijo del alma.
También hizo referencia a Gerardo Hernández, René González, Fernando González y Antonio Guerrero, los otros integrantes de la llamada Red Avispa, a quienes dedicó el texto, afirmando que cualquiera de los cuatro pudo haber escrito el relato.
Durante la presentación del libro, el actual vicepresidente de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores expresó que “su principal propósito es desenmascarar el sistema penitenciario de Estados Unidos y exponer lo deshumanizado de su accionar, cómo obliga a los hombres a aislarse de la sociedad y los impulsa a convertirse en salvajes para poder sobrevivir. En ese momento el ser humano saca lo mejor o lo peor que tiene. Nuestro reto consistía en salir de ese lugar como mejores seres humanos”.
Los restantes textos merecedores del Premio del lector en el 2019 fueron Opolopo Owo. La sabiduría de los oráculos, de Natalia Bolívar, y Benny Moré, símbolo de la música cubana, de Rafael Lam, a cargo de la Editorial José Martí; la Editorial Oriente también estuvo dentro de las premiadas con las obras La retataranieta del vikingo, de Rubén Rodríguez, y Proverbios y cuentos del Lejano Oriente, de Jorge Braulio Rodríguez.
Los restantes libros galardonados fueron Antología, poesía y prosa, de Mario Benedetti (Editorial Arte y Literatura); El cementerio chino de La Habana en la diáspora del tiempo, de Teresita de los Reyes Labarca (Editorial Ciencias Sociales); Los niños prodigios del ajedrez, de un colectivo de autores (Editorial Academia); Amor y mafia en La Habana, de Germán Bode Hernández (Editorial Pablo de la Torriente); Palabras reencontradas, de Ciro Bianchi Ross (Editora Abril) y Té sin limón. Ellas sí hablan de amor y sexo, con selección y prólogo de Dulce María Sotolongo (Ediciones El Abra).
Un reconocimiento especial mereció la Colección Espejo de Ediciones La Luz, por los altos valores de ventas de sus títulos desde hace varios años. En esta edición la editorial de la Asociación de Hermanos Saiz de Holguín, ganó el premio La Puerta de Papel, que se entrega a los libros más reconocidos del Sistema de Ediciones Territoriales durante el año.
El Premio del Lector se otorga desde 2015, cuando el psicólogo e investigador Manuel Calviño se alzara con el Gran Premio por su libro Cambiando la mentalidad… empezando por los jefes, de la Editorial Academia, mientras otros 54 textos han recibido el Premio del Lector, cinco de ellos con el Gran Premio a la obra más vendida en el transcurso de un año.
Felicidades!