Colombia llegó a la Serie del Caribe de Santo Domingo 2022 sin una sola victoria en los diez partidos que había jugado en el certamen durante ediciones anteriores, pero en cuestión de una semana espantaron todos los fantasmas y dieron un giro total para salir triunfantes de la capital dominicana, donde dejaron una huella histórica.
De la mano de los Caimanes de Barranquilla, la nación cafetera cortó su racha de derrotas y se convirtió en la revelación del clásico regional, el cual ganaron por primera vez y de manera inobjetable después de superar (4-1) este jueves a los Gigantes del Cibao en la gran final, celebrada en el Estadio Quisqueya Juan Marichal.
Los colombianos aguantaron la presión de la fanaticada dominicana, ansiosa por celebrar el tercer título consecutivo del país en el torneo y el primero en condición de locales desde el 2012. Sin embargo, esos planes de los anfitriones se desmoronaron ante el empuje de los Caimanes, que compitieron sin complejos y con mucha confianza.
Siguiendo al pie de la letra el plan de atacar temprano en el conteo al abridor cubano Raúl Valdez, los cafeteros tomaron la delantera desde el segundo episodio, cuando conectaron cinco imparables y produjeron tres carreras, remolcadas por sencillo de Brayan Buelvas y sendos dobles de Mauricio Ramos y Dilson Herrera.
Esa entrada fue el único desliz del zurdo del Mariel, quien se recuperó y avanzó hasta el noveno sin permitir libertades al conjunto colombiano. Tan marcado fue su dominio que, desde el último jit del segundo capítulo, enfrentó a 22 bateadores y solo se le embasaron cuatro (dos boletos, un pelotazo y un inatrapable).
Valdez realizó 113 pitcheos, 73 de ellos en la zona de strike; propinó cuatro ponches y permitió cuatro anotaciones y seis imparables en ocho entradas de notable labor. Sin embargo, la ofensiva dominicana estuvo de vacaciones frente a cuatro lanzadores del plantel cafetero, quienes espaciaron siete jits, solo regalaron un boleto y retiraron a nueve por la vía de los strikes.
El Cibao logró romper el hielo en el sexto, cuando Robinson Canó remolcó la única carrera para los anfitriones. Con dos outs, el estelar camarero disparó un batazo que se internó al prado ante el relevista Luis Moreno, abriéndole las puertas del plato a Richard Ureña desde la intermedia.
Los Gigantes desaprovecharon por completo el tremendo despliegue con el madero del cubano Henry Urrutia, en noche perfecta. El tunero, quien bateó de 8-7 entre semifinal y final, despachó un doble y otros tres cohetes, pero del sexto al noveno bate fueron anulados, con 12 turnos en blanco y siete ponches, tres de ellos a la cuenta de Moisés Sierra, el hombre encargado de cubrirle las espaldas a Urrutia.
Los Caimanes, por el contrario, aprovecharon las dos oportunidades puntuales que tuvieron, liderados por Reynaldo Rodríguez, nombrado Jugador Más Valioso del torneo. El inicialista, quien pegó dos imparables y anotó par de carreras en la final, fue parte fundamental de la poderosa ofensiva del plantel barranquillero al batear .500 (26-13) desde el inicio de la lid.
Reynaldo quedó a solo un imparable de igualar el récord de jits en la historia de la Serie del Caribe, el cual poseen Roberto Alomar (1995), Randy Ready (1986) y el cubano Pedro Formental (1953), todos con 14.
La final fue un duelo entre dos managers barranquilleros, algo inédito en Series del Caribe. Los Caimanes de Barranquilla estuvieron comandados por el joven de 34 años, José Mosquera, mientras en el dogout de los Gigantes del Cibao se sentó Luis Urueta, un profesional contrastado con experiencia como coach y director en las Ligas Menores de Estados Unidos, además de ser el hombre que llevó a Colombia por primera vez al Clásico Mundial en el 2017.
Tras el desenlace de este jueves, Urueta elogió a Mosquera, con quien ha llevado una carrera conjunta. “Hay que darle crédito al equipo colombiano. Estoy muy orgulloso del trabajo José (Mosquera), de lo que hizo, porque es verdad que los jugadores son los que salen al terreno, pero nosotros los dirigentes somos los responsables de colocarlos en una situación donde puedan lograr la victoria”, apuntó el director de los Gigantes.
Mosquera, por su parte, reconoció que este triunfo de los colombianos marca un antes y un después en la historia del béisbol cafetero, no solo por el triunfo de los Caimanes, sino por el hecho de que dos mentores de esa nación hayan llegado a la final del clásico caribeño.
“Estamos en un muy buen momento, sabemos el poder que tiene le futbol allá pero tenemos que aprovechar y seguir apoyando a estos muchachos. Tenemos que reforzarnos y reforzar nuestras ligas”, agregó Mosquera.
La victoria de los Caimanes de Barranquilla tiene un enorme valor histórico, tal cual escribió en las redes sociales el otrora estelar Edgar Rentería, una de las leyendas colombianas en MLB, donde ganó dos Series Mundiales en rol protagónico.
“Felicitaciones a @caimanesLPB por representar a Colombia en la Serie del Caribe y quedar campeones. Qué orgullo, qué alegría nos regalan esta noche. Disfrútenlo muchachos! Esto es grande para el béisbol colombiano!”, escribió Rentería en Twitter, donde se desató una avalancha de elogios hacia los Caimanes.
Con información de Efe.